Telederma ahorra seis de cada diez viajes a Valdecilla para consultas de la piel

Este método -llamado Telederma- se aplica con tanto éxito en otras comunidades autónomas que, según cuenta su responsable en Cantabria, María Marcellán, «los colegas catalanes nos dicen que han conseguido reducir casi a cero la lista de espera». En esta región, la digitalización hace de filtro y ya está evitando alrededor del 60% de los desplazamientos que generarían este tipo de consultas. La mujer del inicio acabó en el hospital, pero en el plazo de un mes y medio.

La consulta dermatológica especializada no presencial dio sus primeros pasos en Valdecilla en 2016, momento en que una veintena de centros de salud se vincularon con el programa. Entre ellos, el de Carlos Cerveró, uno de los facultativos de Atención Primaria que lo promovió y apoyó desde Ampuero porque vio lo mucho que podría favorecer a sus pacientes. «Se les hacía accesible el experto sin obligarles a desplazarse 50 kilómetros».

En la actualidad, todos los de las áreas 1 y 2 de Sanidad (una treintena) prestan el servicio si bien -admite Marcellán- hacer las fotos, subirlas a la plataforma debidamente comentadas (explicando si hay picor, dolor, sangrado etc.) para que el dermatólogo se haga una primera impresión «exige un tiempo extra a los médicos de cabecera», así que algunos son más proclives que otros a utilizar la herramienta.

El área sanitaria correspondiente a Torrelavega y Reinosa todavía no se ha sumado al telediagnóstico. Yolanda Montenegro, gerente de esa Zona Básica de Salud, afirma que se están «dando pasos. Esperamos haberlo puesto en marcha antes de que termine este año».

El Telederma actual aspira, además, a reforzarse tecnológicamente. Marcellán cuenta que en los últimos meses ha habido conversaciones con la Consejería de Salud y el departamento de Transición Digital para implantar una aplicación más específica - que funciona por medio de códigos QR- pensada ex profeso para este servicio. La doctora cruza los dedos para que Salud siga adelante con el proyecto pese a los últimos cambios de algunos responsables del organigrama.

Porque, de momento, los medios son bastante elementales. En Primaria se cuenta con una cámara de fotos (o con un móvil) y desde estos dispositivos se agregan las imágenes al sistema al que acceden los especialistas. Desde ahí, - «observando todas las medidas de privacidad»- se hace la valoración. Aún con los recursos de hoy en día, la responsable de Telederma defiende que los datos avalan la apuesta. Actualmente, se están haciendo de 30 a 40 consultas a la semana, «lo que supone unas 150 en un mes normalito. Otros, se dispara: este julio fueron más de 200».

Para Marcellán, diagnosticar a partir de una simple fotografía supone una «complicación» porque «las imágenes no trasmiten toda la información. A veces es todo un reto hacerse idea de lo que estás viendo. Pero, ante la duda, se cita a la persona para una consulta presencial».

Este sería el único hándicap importante. Todo lo demás, «son beneficios». Del lado de los pacientes, la eficacia está probada «porque las lesiones que tienen mala pinta no se van a una lista de espera. Se tratan casi de inmediato. El que no puede esperar pasa por delante, lo que es más equitativo para todos. Si apreciamos que la mancha que nos envían puede ser tumoral, en unos días el paciente está entrando al hospital. En ocasiones, un lunes vemos un lunar agresivo y el miércoles se quita». Ante alteraciones de la piel menos preocupantes, «el paciente también se queda tranquilo, porque o bien se le cita o bien se le pone en tratamiento sin tener que desplazarse al hospital». Esto es valioso para quienes viven lejos de Valdecilla y, sobre todo, para las personas de más edad.

Para los facultativos de Atención Primaria, el contacto regular con el especialista acaba haciendo las veces de «una formación continuada» en Dermatología. «Para ellos es una herramienta muy buena, somos su experto de cabecera» y les sirve para evolucionar en conocimientos, asegura Marcellán, que este 2024 se ha dedicado a difundir el servicio impartiendo charlas y ciclos tanto con la red de Primaria como en el Colegio de Médicos.

Además, ese ente abstracto llamado 'sanidad pública' se beneficia de la actividad telemática. «La lista de espera general se reduce porque no llegan a entrar pacientes a los que se da solución antes». Algo valorable en un departamento en el que, como en la mayoría de secciones de Valdecilla, están a falta de profesionales.