«Tener una cámara delante impone, quizá porque todos los gestos, miradas, reacciones, todo lo que digas lo va a ver la gente»

El cámara recibe el mismo nombre que su herramienta de trabajo, tal vez porque persona y máquina se unen en una simbiosis perfecta para contar la realidad. «Es muy romántico, al final, que lleves una cámara en el hombro y que tú seas otro cámara. Está bien, tiene su gracia», concluye Pablo Bermúdez (Santander, 1971), tras reflexionar un momento sobre ello. Pablo, que trabaja desde hace veinte años en El Diario Montañés, era un adolescente cuando tuvo en las manos su primera cámara, la que compraron sus padres para grabar escenas familiares. La llegada de ese aparato electrónico a su casa despertó tal atracción en él que le sacó el máximo partido y desde ese momento supo a qué quería dedicarse en la vida. Y lo consiguió.

El reportero de El Diario Montañés, tan habituado a observar a los demás desde detrás de la cámara, no está tan cómodo cuando se pone delante de ella. «Tener una cámara delante sí que impone, sí. A mí ahora mismo, que no estoy acostumbrado a estar a este lado, me impone», admite mientras es grabado para este vídeo. «Quizá sea porque al final todos los gestos, todas las expresiones, todo lo que digas es lo que la gente va a ver, a diferencia, por ejemplo, de una entrevista en papel, en la que el entrevistado habla con un periodista que luego es el que interpreta y escribe. Aquí todas las miradas, la reacción a la pregunta, todo es lo que la gente va a ver. A lo mejor eso sí es verdad que pone un poco más nervioso».

A Pablo Bermúdez le ha llegado el turno de meterse en el pellejo de tantos personajes a los que ha colocado el micro, a los que ha enfocado y encuadrado en el visor, a los que ha pedido «di algo, lo que sea» para calibrar el sonido antes de indicar: «Cuando quieras». Este vídeo forma parte de los contenidos especiales preparados por El Diario Montañés con motivo de su 120º aniversario. Antes de la entrevista al camarógrafo se sinceraron delante de su objetivo once fotógrafos que, con sus testimonios personales, conforman un poliédrico retrato del fotoperiodista y de su trabajo. Son Miguel de las Cuevas, Alberto Aja, Andrés Fernández, Javier Rosendo, Antonio San Emeterio 'Sane', Javier Cotera, Celedonio Martínez, Luis Palomeque, Daniel Pedriza, Roberto Ruiz y Juanjo Santamaría.

La serie de vídeos Fotoperiodismo DM120 forma parte de la muestra 'Crónica visual de Cantabria', que puede visitarse hasta el 26 de junio en el espacio Casyc Up de la calle Tantín de Santander. La exposición ofrece una selección de 45 imágenes que nos sitúan en momentos, lugares y circunstancias de máxima intensidad informativa en los últimos 120 años de historia de la región. Las instantáneas en gran formato son un resumen de la actualidad que ha narrado el rotativo a lo largo de todo este tiempo y pertenecen a una recopilación mucho más amplia que se reúne en un libro con el mismo título que puede reservarse en los quioscos y puntos de venta del periódico con el cupón que publica estos días en sus páginas. La obra, de la colección 'Entretiempos', consta de 330 fotografías, todas memorables.

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