Tímido regreso a las aulas de los alumnos del último curso de Formación Profesional

Desde el pasado día 8, parte del alumnado cántabro puede volver a clase, una decisión, en cualquier caso, voluntaria. Dentro de ese grupo están los estudiantes de Formación Profesional que titulan este año, es decir, aquellos que están inscritos en los segundos cursos de un grado medio o de un grado superior. ¿Y para qué volver al instituto en FP? Además de para resolver dudas en una tutoría, estos alumnos tienen la posibilidad de exponer presencialmente los trabajos que este año, y debido a la crisis sanitaria, han sustituido a la Formación en el Centro de Trabajo. Los estudiantes acometen estos proyectos cuando han aprobado el resto de módulos de su grado.

La Consejería de Educación revela que cerca de 3.000 alumnos de FP -a razón de 1.223 de grado medio, y otros 1.796 de grado superior- tienen estos días la posibilidad de regresar a clase. Sin embargo, la opción presencial no ha sido mayoritaria. Una razón de peso es que los alumnos también han podido realizar sus presentaciones por vía telemática.

En varios institutos consultados, la cantidad de estudiantes de FP que han optado por volver al aula es pequeña. Ocurre, por ejemplo, en el IES Montesclaros (Reinosa), o en el IES Peñacastillo, de Santander, un centro éste con amplia oferta de Formación Profesional, donde sólo han notificado su vuelta siete alumnos. Su directora, Manuela Ceballos, cree que los motivos por los que una cantidad tan reducida de alumnos ha regresado a las aulas son diversos, pero pesa especialmente que muchas de sus dudas se hayan resuelto ya por vía telemática, o que, en los grados superiores, los proyectos se puedan presentar virtualmente.

Sin embargo, la actividad no cesa en este centro, que está preparado para recibir a más del 65% de sus alumnos de 2º de Bachillerato. Será a partir del próximo lunes. Además, el IES Peñacastillo es, este año, 'centro EBAU', es decir, acogerá la celebración de parte de los exámenes de acceso a la universidad.

La reorganización del centro para que la educación presencial y los exámenes tengan lugar con garantías ha sido «laboriosa», explica Ceballos, y «todo ha ido bien». Les ayuda, entre otras cosas, que la reincorporación de los estudiantes sea escalonada, indica la directora.

Sin cerrarse aún el curso 2019-2020, la Administración, los centros, los docentes, los alumnos... todos se centran ya en el que viene. Hoy, el Ministerio de Educación presentará a las comunidades, Cantabria entre ellas, un documento elaborado junto con el de Sanidad acerca del próximo año escolar. Será en el seno de la Conferencia Sectorial.

A tenor de lo que adelantó ayer la ministra Isabel Celaá, el Gobierno quiere que el curso que viene sea eminentemente presencial, y propone relajar las medidas iniciales de distancia interpersonal en los cursos de Educación Infantil o Primaria.