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Los trenes cántabros sufrieron el año pasado más de setenta ataques de grafiteros, que supusieron un perjuicio económico superior a los 1,1 millones de euros para Renfe. En total, esos actos vandálicos afectaron a una superficie en los convoyes de casi 3.900 metros ... cuadrados.
En 2023, además, se batió el récord de actos vandálicos protagonizados por grafiteros, ya que, como se recoge en el Sistema Estadístico de Criminalidad de la Secretaría de Estado de Seguridad –dependiente del Ministerio del Interior–, fueron 72 las infracciones penales registradas bajo el epígrafe de 'daños, daños en vehículo y deslucimiento de bienes inmuebles ferroviarios' en los tres primeros trimestres del año.
Se trata de datos proporcionados por el Gobierno en abril de este mismo año a una pregunta escrita formulada en el Congreso por los diputados nacionales cántabros del Partido Popular Félix de las Cuevas y Javier Noriega. En dicha contestación, se indica el número de actos vandálicos sufridos por vehículos, bienes, instalaciones e infraestructuras ferroviarios en Cantabria entre los años 2018 y 2023 y también el número de personas detenidas e investigadas por estos hechos en cada uno de los ejercicios.
Actos vandálicos Según Interior, en Cantabria se produjeron 72 ataques en 2023; según Renfe, fueron 171
Limpieza Recuperar el estado original de los vagones requirió 740 horas de trabajo
Guardia Civil Mantiene abierta la investigación para dar con autores de pintadas en los trenes y en la vía pública
Así, en 2018 se produjeron trece episodios de este tipo, con un balance de cinco detenidos/investigados. El número de ataques descendió al año siguiente, en que se contaron nueve, con dos detenciones a los presuntos autores de los mismos. Fue, prácticamente, la misma cifra de 2020, cuando, pese a las restricciones de la pandemia, los vándalos llegaron a actuar en diez ocasiones, lográndose identificar y detener a uno de ellos. 2021 supuso un salto cuantitativo en este tipo de delitos, que se duplicaron en la región: hasta 22 infracciones penales por este motivo se reflejan en el Sistema Estadístico de Criminalidad, que se saldaron con dos detenidos. En 2022 se produjo un descenso en el número de actuaciones de los grafiteros, 16, pero también se redujo el número de denuncias: no hubo un solo detenido por los hechos.
La situación experimentó un cambio radical en 2023, cuando los actos vandálicos en los trenes cántabros se multiplicaron hasta alcanzar la cifra récord de 72 entre enero y septiembre del año pasado. Por la comisión de estos delitos las fuerzas del orden lograron detener a cuatro personas.
Las cifras que maneja la compañía ferroviaria son aún mayores, y crecen hasta las 171 incursiones de grafiteros en instalaciones de Renfe en 2023, que supusieron un perjuicio económico superior al millón de euros, en el que se incluyen los retrasos y supresiones de servicios que causaron. En 2023, según la información facilitada por Renfe, se emplearon unas 740 horas de trabajo en la limpieza de las pintadas, un tiempo durante el cual los trenes tuvieron que estar detenidos 'de forma no prevista'.
Este mismo jueves, la Guardia Civil daba a conocer el arresto de dos jóvenes, de 18 y 23 años y vecinos, respectivamente, de los municipios de Reocín y Polanco, como presuntos autores de un delito de daños por la realización de grafitis en un vagón ferroviario en Requejada. El instituto armado subraya además que a uno de ellos también se le considera responsable de hacer otra pintada en un puente de Cartes el pasado abril. A principios del presente mes de agosto se tuvo conocimiento de la realización de grafitis en un vagón en la estación de Requejada y se pudo determinar que los presuntos autores eran dos jóvenes, cuya identidad se averiguó. La empresa denunciante cuantificó los daños en unos 1.300 euros.
La Guardia Civil mantiene abierta una investigación dirigida a la identificación de los autores de daños en estaciones, apeaderos y unidades ferroviarias, así como en la vía pública de las diferentes localidades de Cantabria, y las patrullas de seguridad ciudadana realizan labores de prevención y obtención de información.
Los grafiteros pintaron cerca de 80.000 metros cuadrados de superficie en trenes durante 2023, lo que supuso un coste de 25 millones –unos 70.000 euros diarios–, y cuya limpieza requirió 15.000 horas de trabajo, durante las cuales los trenes permanecieron detenidos. En total, se denunciaron 3.977 intrusiones de grafiteros en las instalaciones de Renfe –171 de ellas en la región–, lo que arroja una media de once actos vandálicos diarios. La presencia de vigilantes, que permitió abortar 1.194 ataques, evita que los grafiteros puedan hacer pintadas de mayores dimensiones.
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