La Unión de Guardias Civiles denuncia «la alarmante falta de efectivos en Cantabria»

Fuentes del colectivo son tajantes con lo sucedido: «No hay agentes suficientes para atender todo lo que hace falta atender. Los cuarteles abiertos en los ayuntamientos son sólo un espejismo. Suponen una falsa imagen de seguridad». «Si mantienes abiertos esos edificios pero luego no tienes gente para cubrirlos, o sólo tienes a una pareja que está por la mañana y luego nadie atiende, al final es solo una figuración que de nada sirve».

No es la primera vez que las diferentes asociaciones de la Benemérita protestan por la falta de recursos humanos, pero en este caso inciden especialmente en el trastorno que este hecho le causa a los ciudadanos y en «el peligro de que todo esto termine notándose en la falta de seguridad, sobre todo en las zonas más rurales», advierten.

Delegación de Gobierno ha destacado en numerosas ocasiones que en los últimos cuatro años el número de agentes ha crecido en Cantabria. Lo cierto es que se ha recuperado respecto a la estrepitosa caída que se registró en 2015, donde se contaban sólo 1.164 efectivos, pues ahora los cuarteles de la región suman 1.200 agentes; pero aún están lejos, por ejemplo, de los 1.249 que había en 2011.

«Son los mismos efectivos que había hace una década y sin embargo las necesidades han cambiado mucho», destacan. Se refieren al incremento de la población, a la necesidad de incrementar la rapidez de la reacción al delito y, sobre todo, a reforzar la vigilancia de los municipios más turísticos en temporada estival. De hecho, afean a Delegación de Gobierno y a la Comandancia que las cifras de efectivos barajadas este último verano dentro del plan especial promovido desde la Benemérita «no son como se han vendido».

«Se está enviando a estos municipios patrullas de otros para que hagan acto de presencia tan sólo unos minutos y regresen a su puesto de origen. De esta manera incrementan la estadística de la presencia de agentes en Castro, Laredo, Noja y todos estas localidades que en verano tienen más problemas; pero a la postre el resultado es el mismo en materia de seguridad porque lo que se busca es maquillar la estadística», explican representantes de estas asociaciones.

La propuesta, dicen, pasa por incrementar el número de agentes. «Y luego por racionalizar el número de puestos. Quizá no hace falta tener cuarteles en todos los pueblos con una sola patrulla, sino puestos con buen número de efectivos que abarquen zonas más amplias. ¿No hacemos eso con la Sanidad? ¿O tenemos un Hospital en cada Ayuntamiento?».