«La Universidad de Cantabria siempre ha sabido reinventarse»

–Ligado a la UC durante casi 40 años, ha sido testigo de su transformación. A sabiendas de qué es difícil resumirlo, ¿qué destacaría de este gran cambio?

–La UC actualmente es uno de los activos más importantes de Cantabria. Siempre ha sido motor económico, de transformación social y un instrumento clave en la formación de nuevas generaciones. Ha sabido reinventase afrontando modificaciones significativas. Los rankings dan fe de ello. ¿Cómo una universidad de una pequeña región y con presupuesto escaso lo ha conseguido? La UC ha tenido la suerte de contar con personas de la propia institución y externas, que con su esfuerzo y compromiso tomaron decisiones y marcaron el camino. Nuestro lema del 50 aniversario –'Esto es sólo el principio'– implica que habrá que tener visión de futuro y tomar decisiones importantes. Las instituciones y la comunidad universitaria deben contribuir para continuar mejorando. Las prioridades se ven en los presupuestos y tengo la confianza de que así será.

–Comenzó su andadura en la UC en 1984. ¿Puede compartir alguna vivencia que haya marcado su paso por la Universidad?

–El desarrollo de la autonomía universitaria, en 1985; las transferencias de la Educación Superior, en 1996; el impulso de los campus universitarios y de la investigación, entre la década de 1990 y principios de este siglo; la concesión de Campus Internacional, en 2007, y también el primer contrato-programa plurianual 2006-2009. Y están la crisis económica, que supuso recortes financieros importantes que aún no hemos recuperado totalmente; el segundo y último Contrato Programa plurianual 2017-2020; la gestión de la pandemia, que fue un enorme esfuerzo colectivo, y la concesión de Universidad Europea al consorcio Eunice en el que participamos, y que reafirma la voluntad de internacionalización que siempre hemos tenido.

–La UC le ha concedido su Medalla de Plata. ¿Qué significa para usted este reconocimiento?

–Una enorme alegría. Mi agradecimiento al rector, Ángel Pazos, por proponerla y al Consejo de Gobierno por concedérmela. Creo que es un reconocimiento al tiempo que he estado en puestos de responsabilidad. La comunidad universitaria es muy activa y en continua búsqueda de ayudas para poner en marcha proyectos. No vale decir que no se puede hacer o que es muy complicado. Nuestra labor siempre debe tener como objetivo facilitar las cosas. Mi agradecimiento por el apoyo y respeto al colectivo del Personal de Administración y Servicios por el compromiso y dedicación con el que realizan su trabajo; y también a los rectores y presidentes del Consejo Social por darme su confianza y apoyo en los momentos difíciles, que los hubo.

–Como uno de los valedores de sus presupuestos, este año la UC ha aprobado unas cuentas equilibradas. ¿Se va con buen sabor de boca?

–Siempre hemos sido responsables, manejamos dinero público. Por ello tenemos unas cuentas saneadas. Hay una normativa que cumplir. El Consejo Social, que aprueba los presupuesto y su liquidación, hace su labor. Se realizan auditorías internas y externas y, finalmente, el Tribunal de Cuentas comprueba que estas sean correctas. El seguimiento a lo largo del año de los ingresos y gastos para ver su evolución es fundamental. Me gustaría que el próximo Contrato-Programa plurianual recogiese una importante dotación de fondos para inversiones. Los principales edificios e instalaciones de la UC tienen una media de 40 años. Su reforma, adaptación y mejora es imprescindible. Se necesitan nuevas instalaciones. Hay que poner los campus de la UC a la altura que merece la actividad que desarrollan.