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Los pacientes que tengan cita en el Hospital Valdecilla para una radiografía en el próximo mes, principalmente de tórax o huesos, deberán estar atentos a sus teléfonos porque puede que les cambien de emplazamiento, fecha y horario para realizarse la prueba. El Servicio de Radiodiagnóstico ... está renovando equipamiento y, para evitar que se acumulen aún más las listas de espera mientras se instalan y calibran las nuevas máquinas, se han puesto en marcha una serie de medidas alternativas. De un lado, se ampliará el horario a los fines de semanas –igual que se hace desde hace años con las resonancias y los escáneres (TAC)– y, por otro, se instalará una unidad móvil en el Hospital de Liencres para absorber parte de la actividad afectada por la sustitución de los equipos.
Según indica el Servicio Cántabro de Salud (SCS) en nota de prensa, se trata de «impulsar todo lo posible la realización de pruebas de radiología simple» hasta que los cuatro equipos para hacer radiografías, que vienen a sustituir a otros cuatro que ya estaban obsoletos, entren en funcionamiento. Mientras tanto, los pacientes pendientes de su prueba en las próximas semanas pueden recibir una citación para un sábado (mañana o tarde) o un domingo (por las mañanas) en el servicio de Valdecilla o ser remitidos a la unidad provisional de Liencres.
Por eso, desde el hospital hacen un llamamiento a los ciudadanos susceptibles de estar afectados por esos cambios «para garantizar el mejor aprovechamiento de estas iniciativas». Y aclaran que las llamadas serán realizadas por personal administrativo responsable de las citaciones a través de teléfonos fijos, así que empezarán por el prefijo regional 942. No obstante, matizan también que «no necesariamente son los números ya conocidos por los pacientes», por lo que recomiendan que «se atiendan las llamadas con este prefijo» aunque no les resulte familiar el teléfono.
Esta renovación tecnológica, con cargo al presupuesto de la comunidad autónoma, se suma a la realizada recientemente a través del programa Inveat del Ministerio de Sanidad, sufragada con fondos europeos. Aquel plan incluyó la ampliación de las dependencias del Servicio de Radiodiagnóstico hacia la planta baja de la torre B (-3, a la altura de Urgencias, si se entra desde Valdecilla Norte) –la obra fue financiada por el SCS y realizada por Dragados–, donde se estrenaron hace un año tres salas de intervencionismo (dos para patología vascular y otra de neurorradiología, clave para los casos de ictus) y se colocaron dos escáneres, uno de ellos a cargo del Inveat, igual que el TAC sustituido en Urgencias y una de las resonancias añadidas a la dotación del servicio. Y el pasado abril se puso en marcha también el quirófano híbrido, dotado con un robot de radiodiagnóstico vascular que permite 'navegar por los vasos sanguíneos' para dilatar arterias obstruidas o tratar casos de aneurismas con la colocación por catéter de un injerto de tubo minúsculo (endoprótesis).
Ahora, la renovación llegará a los equipos de Radiología simple de Valdecilla y Liencres, que incorporarán máquinas con «mejores prestaciones en cuanto a calidad de imagen y fiabilidad». Pero hasta que se complete el cambio, el servicio tiene que ajustar la actividad a este periodo de transición necesario para la desconexión de los antiguos equipos y la instalación y el calibrado de los nuevos, procurando que el atasco en pruebas diagnósticas no se agrave.
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