Adiós a la ola de calor

Muchos habían sacado la cazadora y el jersey del destierro del armario, pero finalmente no los han tenido que usar. La predición era que hoy el mercurio descendería vertiginosamente. Y no se ha equivocado, aunque las temperaturas que se han registrado hasta el momento son agradables. Se podría decir que está haciendo uno de los típicos días del verano cántabro: algo de lluvia fina por la mañana, cielos que se van despejando poco a poco -al menos en la capital- y tímidos rayos de sol.

Una jornada plácida a pesar de que las temperaturas máximas registradas hasta el momento nada tienen que ver con las de ayer. Sin ir más lejos, Tama, que este lunes estableció el récord regional, ha visto descender casi 12 grados la temperatura máxima (de 35,4º a 24º a las 13.30 horas). Un descenso similar al de Cubillo del Ebro (de 35,4º a 23,5º), San Felices de Buelna (35,3º a 24,3º), Ramales de la Victoria (35,2º a 24,7º) o la estación del aeropuerto de Saantander que ayer llegó a los 30 grados y hoy se ha quedado en 25 a las 14.30 horas.

La previsión para la tarde es que predominen los cielos nubosos, que irán disminuyendo en el litoral al final del día. Se podrían registrar lluvias en general débiles, muy poco probables en Campoo y los Valles del sur.

Mañana, según la Agencia Estatal de Meteorología, el día será muy parecido al de hoy. Cielos con nubosidad en aumento, lluvias débiles dispersas al principio, que podrían aumentar por la tarde, sobre todo en el oeste. Tampoco descarta que haya brumas y bancos de niebla por la mañana. Las temperaturas no sufrirán cambios con respecto a hoy. Las temperaturas máximas seguirán bajando y la previsión es que no pasen de los 23 grados en puntos como Castro Urdiales, Santander o Torrelavega.

El descenso de las temperaturas ha motivado la desactivación, por parte de la Consejería de Medio Rural, del nivel máximo de alerta del operativo de lucha contra los incendios forestales, que estaba vigente desde la semana pasada.

Desde ahora, se mantiene el nivel uno del operativo, que funciona todo el año salvo en situaciones de riesgo elevado, y que implica un menor número de efectivos de guardia (13 guardas y 3 cuadrillas forestales) en comparación con los que se movilizan en nivel dos (hasta 65 guardas y 22 cuadrillas, además de los ingenieros que coordinan el operativo y los operadores de la emisora central de la dirección general).

La Dirección General del Medio Natural permite desde hoy las quemas en suelo rústico y monte, y sigue pidiendo prudencia y colaboración para evitar negligencias o accidentes que puedan ocasionar incendios forestales.