Vivienda adeuda aún 2,5 millones de euros del bono alquiler a 2.100 jóvenes cántabros

Hay algo mas de 2,5 millones de euros (en concreto una partida de 1.935.000 euros para pagar los meses de septiembre de 2022 a abril de 2023 y tres partidas de 220.000 cada una, correspondientes a los meses de mayo, junio y julio) que el gobierno de España ya ha enviado a Cantabria y cuya tramitación ya está hecha, pero que no ha llegado a sus destinatarios simplemente porque alguien ha decidido no pagar. «No hemos encontrado ninguna explicación lógica por la que área socialista del anterior gobierno no haya autorizado el pago de este dinero. Es incomprensible. El PSOE que tanto presume de ser progresista y social en este caso ha dejado tirados a miles de jóvenes que llevan esperando ya un año estas ayudas al alquiler», lamenta el consejero Roberto Media, al referirse a la socialista Eugénia Gómez de Diego, quien estaba al frente del departamento que puso en marcha estas ayudas a finales de julio de 2022.

Fue hace un año cuando en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC) se publicó la concesión de estas ayudas, impulsadas desde el Gobierno central para facilitar la emancipación de los jóvenes. Desde un primer momento, se hizo evidente que los cálculos habían fallado: cuando se publicó, a finales de julio del año pasado –el Gobierno central anunció que se ponía en marcha la medida a comienzos de 2022–, se indicaba, con una previsión excesivamente optimista, que se resolverían y notificarían en un plazo de tres meses, esto es, antes del fin de 2022. Pero el año se agotó, y arrancó 2023 sin que el Bono Alquiler Joven se ingresase en las cuentas de los solicitantes, así que, por tercera vez, se fijó una nueva fecha para tenerlo todo listo: sería en algún momento durante el primer trimestre. Pasó enero, febrero y también marzo, y el dinero seguía sin llegar, aunque la meta parecía cada vez más próxima. En marzo de 2023 se publicó el listado de quienes habían presentado de forma correcta la documentación y quienes aún debían adjuntar más papeles: más de dos tercios de las peticiones presentadas, 1.934, contenían algún defecto a subsanar. Se aseguró entonces que la convocatoria y los pagos estarían resueltos a finales de abril, pero no fue hasta mediados de junio, cuando Vivienda anunció que iniciaba el pago a 1.285 jóvenes de los 2.100 beneficiarios admitidos. Casi dos meses después, hay todavía algo más de 800 cántabros que todavía no han visto ni un euro de esas ayudas y el resto está esperando el pago del dinero concedido.

Entre los que todavía no han visto un duro está María Hernández, de 33 años y residente en Torrelavega. «No he cobrado nada de la ayuda. Sí sé que ha habido gente que ha recibido casi la mitad, pero a mí no me han pagado nada y esto ya es insoportable», explica esta mujer que vive con su hija pequeña en un piso alquilado en la capital del Besaya. María, que trabaja sólo media jornada para poder cuidar de la menor, comenta que mientras el dinero de esta ayuda no llegue, está sobreviviendo como puede. «Estoy tirando de los pocos ahorros que tenía y además mi madre me está ayudando mucho para seguir pagando el alquiler. No hay otra manera». María sabe que hay algunas personas que ya han cobrado, «aunque creo que la mayoría todavía no. Yo estoy en un grupo de Telegram, en el que los 20 que estamos tenemos el mismo problema, que no hemos cobrado nada. Por lo que me han dicho, los que ya han cobrado ya una parte de las ayudas son los que presentaron recibos de alquiler de los primeros meses del año 2022, antes de que saliese publicada en el BOC la orden que regulaba las ayudas. Yo no lo sabía y sólo presenté los recibos desde agosto», comenta la torrelaveguense en un tono desesperado. María, además, ha inciado una recogida de firmas a través de Change.org, para exigir el pago del Bono Alquiler Joven en todas las comunidades autónomas en las que también se están produciendo estos retrasos e impagos. Por el momento sólo tiene 60 firmas. La torrelaveguense no sabe ya a quién dirigirse para poder recibir las ayudas, porque en Vivienda me dicen que la tramitación está hecha, pero que ellos no son los responsables del pago. Se pasan la pelota de unos a otros y mientras tanto nosotros llevamos un año esperando las ayudas», argumenta.

El caso de Sara Pelaz es similar, porque aún no ha cobrado todo el dinero concedido, pero sí ha recibido una parte. «Yo pedí la ayuda en agosto y en junio de este año me pagaron 1.750 euros. Es decir, casi diez meses después. Me pagaron esa primera parte y por supuesto la usé para seguir pagando el alquiler. Ese dinero ya está gastado», explica Sara, que vive en Mogro y que en la actualidad está en el paro. «Así que estoy otra vez sin dinero y ahora también sin trabajo». Ella es profesora, pero como no tiene plaza fija, hace sustituciones. «Espero que a partir de octubre vuelva a trabajar y a tener ingresos». Después de todo se siente hasta afortunada. «Al menos he cobrado algo, pero una amiga mía ha tenido que volver a vivir con sus padres y dejar lo de emanciparse por que no le habían pagado nada y no le llegaba», lamenta Sara.

Estos impagos de las ayudas al alquiler de los jóvenes han sido precisamente uno de los temas de conversación de este jueves en el Consejo de Gobierno, según confirma el consejero Roberto Media. «La Dirección de Vivienda ya ha dado la orden para que se pague de manera inmediata este dinero que el gobierno de Cantabria adeuda a miles de cántabros desde hace un año, algo incomprensible», anuncia.