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El vuelo que cubría este sábado la ruta entre Alicante y Glasgow (en Escocia) fue desviado ayer al aeropuerto Seve Ballesteros de Santander a consecuencia de la conducta violenta de un pasajero a bordo.
El vuelo, operado por la compañía Ryanair, salió del aeropuerto de Alicante a las 12.09 horas y, aproximadamente una hora más tarde, el comandante solicitó aterrizar en la capital cántabra debido al comportamiento «inapropiado» que mantenía uno de los viajeros.
El aparato tomó tierra sin ninguna otra incidencia, ha informado la cuenta Controladores Aéreos en su red social X (antes Twitter).
Una vez en tierra, se desembarcó al pasajero problemático. La Policía Nacional le hizo los oportunos controles y el avión pudo continuar su ruta pasadas las 14.00 horas, según han informado fuentes policiales a Europa Press.
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