Fauna y flora

Además, destacan por su singularidad y belleza el castañar de Pendes, el hayedo de la Llama (en Bejes), los viñedos que abundan por Tama (de los que se extrae la uva, materia prima del afamado orujo lebaniego) y –en el límite con Peñarrubia– la llamada 'braña de los tejos', un espectacular bosque de milenarios ejemplares del considerado antiguo árbol sagrado para las tribus que antaño habitaron estos lugares.

En cuanto a árboles singulares, hay que nombrar el castaño 'La Narezona', uno de los más espectaculares de Cantabria, situado en el monte de Casillas, en Ojedo, el enebro de Viñón y el tejo y olivo monumentales de Lebeña. También por este pueblo son frecuentes los serbales domésticos y el serbal aceja, ambas especies de frutos comestibles. Además, es posibe encontrar por esta zona una planta que no es usual en Cantabria, la peonia, así como localizar en las cercanías de Cabañes el cardo Mariano, una planta medicinal famosa por sus propiedades hepáticas.

El municipio de Cillorigo, al igual que toda Liébana, es una zona privilegiada donde se pueden contemplar una gran variedad de especies animales. Así, sobresale la presencia de mamíferos como el lobo, rebeco, ciervo, corzo, jabalí o nutria, y aves como el buitre leonado, alimoche, águila real, águila culebrera o azor, entre otras muchas.

Dentro de los límites del municipio se encuentran cuatro lotes de la Reserva Nacional de Caza del Saja, la más extensa de España, con unos 1.600 km2 de superficie: Poda y Cordancas, Bicobres Norte, Bicobres Sur y Arabedes.