Naturaleza

El paisaje del municipio de Miera está definido por el modelado kárstico en el que variadas formas proporcionan una irregular topografía a las laderas salpicadas de peladas cumbres, donde aflora el roquedo, en torno a Enguinza, un agreste macizo de roca caliza, que domina el tramo medio del río Miera. A su cumbre más alta, de 961 m de altitud, se puede ascender desde Mirones a través de un espectacular paisaje de hoyos y crestas, con numerosas cabañas ocupando los escasos lugares propicios. Entre las elevaciones del municipio destaca la de Peña Pelada, una agreste peña de 700 m de altitud situada en la cuenca del Miera. Otro recurso natural de importancia son las gargantas del Miera, excavadas por el río del mismo nombre al abrirse paso hacia el mar entre los macizos calizos que separan las zonas de San Roque de Riomiera y Liérganes.

Ríos. Sin duda el recurso más importante es el río Miera, que da nombre al municipio y es uno de los principales de Cantabria. Catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), nace en Portillo de Lunada y sus cabeceras se caracterizan por su morfología glaciar. Tras pasar por San Roque de Riomiera, sus aguas continúan encajadas entre agrestes laderas calizas hasta llegar a Miera entre vigorosos relieves calizos formando un estrecho valle encajado entre Mirones y Mortesante. Su curso continúa por los municipios de Liérganes, donde vuelve a abrirse, y Riotuerto (La Cavada), para terminar su trayecto en la ría de Cubas, desde donde desemboca al mar. Fruto de su cauce pedregoso, el Miera goza de una importante población de trucha.

Por último reseñar el paraje conocido como los pozos de Noja. Se trata de pequeños lagos situados en el macizo de Las Enguinzas. Relacionados con un antiguo salto para la producción de energía hidroeléctrica, el pozo de arriba está actualmente seco, mientras que el de abajo se conserva lleno.