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Núcleos de población | Noja | Cantabria 102 Municipios

Núcleos de población

Jueves, 16 de enero 2020, 12:13

Este municipio con un solo núcleo, Noja 2.218 hab. (2004), se organiza en los barrios de El Arco, El Brusco, Cabanzo, Castrejón, Fonegra, Palacio, Pedroso, Ris, La Rota y Fonegra, situados en torno a la capital, y los barrios de Helgueras y El Brusco, asentados a los pies de Montes Mijedo (ninguno de ellos tiene la consideración de núcleo urbano).

El barrio de El Arco se encuentra al oeste, en el cruce de la CA-147, en dirección a Beranga, con la CA450, en dirección a Soano. En el sitio de Las Escabadas, se puede ver la llamada casa de Vara, una construcción regionalista que se atribuye a Leonardo Rucabado.

Los barrios de Helgueras y El Brusco se asientan a los pies de Montes Mijedo, también llamado El Brusco, junto a la playa de Trengandín (también conocida como de Helgueras y de El Brusco). El primero se extiende por la orilla oriental de la marisma de la Victoria, incluida, junto a los humedales de Joyel y Santoña, dentro de la misma Reserva Natural. La Victoria ocupa un sector de 151 has, que cierra el arenal de Trengandín y mantiene sus condiciones gracias al agua que recibe de varios manantiales. En Helgueras se puede ver un antiguo puente del siglo XVII y un molino de marea, documentado desde comienzos del mismo siglo. En El Brusco se yerguen las ruinas de la ermita de San Nicolás (inventariado en 2003), un edificio datado a finales del siglo XVI.

Cabanzo está situado al suroeste, cerca del límite con Arnuero. En él se alza la casa del licenciado Antonio García de Zilla. Sus trazas se atribuyen a Bernabé de Hazas y la capilla, a su discípulo Antonio Torre. Otros edificios de interés de este barrio son la casona de Cabanzo, reconstruida en 1735 por Juan Antonio de Cabanzo y de la Gándara y Josefa de Assas Venero; y la Casa del capitán Francisco de Venero (inventariada en 2001), construida a finales del siglo XVII, en la cual también se considera posible la intervención de Antonio Torre.

El barrio de Castrejón está en el extremo occidental de Noja. Se extiende al margen de la marisma de Joyel, otro de los humedales incluidos, junto a Victoria y Santoña, en la misma Reserva Natural. En su conjunto conforman uno de los sistemas de acuíferos más importantes del norte peninsular. También está considerado Zona de Especial Protección de Aves, pues es lugar de paso e invernada de miles de aves migratorias, algunas de ellas en peligro de extinción. En los márgenes de la marisma se pueden ver las ruinas de un gran molino de mareas, llamado del Joyel, cuyo origen se remonta al siglo XVII.

Los barrios de Fonegra y La Rota se hallan al sur del centro urbano, en las inmediaciones de Arnuero, en la orilla occidental de la marisma de la Victoria.

El barrio de Palacio se extiende sobre la avenida de Ris, la CA 451, al oeste de Trengandín y el centro de Noja. En este último sector se encuentran dos de los monumentos más emblemáticos de la localidad: el palacio de Albaicín, de Leonardo Rucabado, y la iglesia parroquial de San Pedro, construida en el siglo XVI, sobre el antiguo emplazamiento de un monasterio altomedieval.

Pedroso está junto a la peña Pombera (Pumbera la Vieja). Aquí se puede ver la casona de Ris y Garnica, una residencia señorial mandada construir por José de Ris Assas, a comienzos del siglo XVIII.

El Ris se extiende junto a la playa homónima. Este arenal está resguardado por una serie de islotes rocosos, en uno de los cuales se yergue la ermita de San Pedro (inventariada en 2003). Otros monumentos de interés de esta zona son la ermita de San Juan (inventariada en 2003), cuyo origen se remonta a la Edad Media; los restos de la torre tardomedieval de Venero, vinculada a la casa de los Giles; y la casa de Ris, erigida para Juan Ruiz de Ris Assas y María Pérez del Otero. En el Ris está el Centro de Ocio Playa Dorada, un moderno complejo cultural y deportivo.

El barrio de Trengandín, abarca la sección conocida como Mies de Valle y se halla en las inmediaciones de la playa homónima, un extenso arenal que se prolonga hasta la punta de El Brusco, límite natural con el municipio de Santoña. En este lugar se puede ver la casa del licenciado Domingo García de Zilla, datada a finales del siglo XVII. Se trata de la casa-solar de la rama principal de la familia García de Zilla, cuyos miembros ejercieron durante la Edad Moderna el cargo de alcalde mayor. También aquí se alza la torre de los Velasco, también llamada de los Velasco, declarada Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en 1992.

Varios de los monumentos citados y otros localizados en Noja gozan de la protección que les garantiza su naturaleza de Bien de Interés Cultural. Se trata de la Casa-Palacio de Zilla (casa-solar de la familia Zilla), declarada Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en 1994; la casa de doña Obdulia Bonifaz y Ruiz de Zorrilla (1915), también llamada Palacio de Albaicín, declarada Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en 1992; el chalet de Manuel Morales, inventariado en 2001; y el molino de la Victoria, declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento en 2002.

Son naturales de Noja los religiosos Domingo de Assas y Vélez de Argos (1584–¿?), Antonio García de Zilla (¿?–1715) y Pedro López de Moncalián (1816–1898); los militares Francisco de Venero y Cabanzo (Siglo XVIII) y Luis Vicente de Velasco Isla (1711-1762); y el pintor Joaquín Martínez Cano (Noja, 1953). Así mismo, durante la Edad Moderna nacieron en este lugar numerosos artífices, entre ellos se cuentan ensambladores como Rodrigo y Juan de los Corrales Isla (activos en el XVII) y canteros como Pedro de los Corrales (activo en el XVII), Diego Ibáñez Pacheco (siglo XVII) y Domingo Ruiz de Ris (fallecido en 1689).

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