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consuelo de la peña
Jueves, 5 de mayo 2016, 07:16
Al Ayuntamiento de Laredo le va a salir cara su decisión de adjudicar la organización de la recreación del Desembarco de Carlos V de los años 2014 y 2015 a la empresa pejina De la Fuente Producciones S. L. Un juez ha determinado ahora que ese acuerdo fue «arbitrario y erróneo», ya que la oferta de la adjudicataria no era la mejor. Todo lo contrario, la superaba con creces la otra empresa competidora, Imago Publicidad y Producciones S. L., que llevó el caso a los tribunales, que ahora le han dado la razón.
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 ha anulado la adjudicación y ha reconocido que la oferta de la empresa excluida mereció ser la ganadora del concurso, además de imponer el pago de las costas judiciales al Ayuntamiento. Sin embargo, por tratarse de un hecho ya acaecido, la sentencia no podrá ejecutarse en sus términos, lo que obligará al Consistorio pejino a indemnizar a la empresa perjudicada. No obstante, la resolución no es firme y es más que probable que la administración municipal recurra ante la Sala de lo Contencioso Administrativo.
El varapalo judicial que propina el juez al Ayuntamiento de Laredo termina además con la hegemonía de De la Fuente Producciones en el desarrollo de este evento cultural y turístico de Laredo, que se desarrolla todos los años a finales de septiembre. Antonio de la Fuente, director gerente de la mercantil, fue el artífice de la primera edición del Desembarco en el año 2000 y desde entonces ha tenido la encomienda de la fiesta en todas sus ediciones, excepto en dos ocasiones.
En los últimos años, la adjudicataria tenía como competidor directo a Imago Publicidad y Producciones que, sin embargo, no consiguió desbancar a la empresa que tradicionalmente se ha ocupado de la organización de la fiesta, declarada de Interés Turístico Regional.
La última contratación se produjo en septiembre de 2014, cuando el Ayuntamiento de Laredo adjudicó a De la Fuente Producciones en 82.000 euros más IVA la celebración de los actos de desembarco de Carlos V y el mercado renacentista para 2014 y 2015, frente a la propuesta de Imago, que ascendía a 72.600 euros más IVA.
Disconforme con la adjudicación, la empresa excluida recurrió a los tribunales. Su abogado Eduardo Sierra alegó que el funcionario que realizó un informe sobre las dos ofertas, en el que el Ayuntamiento basó su decisión, mantiene una «amistad íntima» con Antonio de la Fuente, adjudicatario del concurso. Como prueba de ello aportó fotografías en las que se veía a ambos celebrando la victoria en un partido de fútbol o al funcionario de figurante en el desembarco.
Pero la juez Ana Rosa Araujo ha rechazado este argumento porque sostiene que las fotografías no son prueba suficiente de la supuesta amistad íntima. Sin embargo, en cuanto al fondo de la controversia, da la razón a la recurrente. Y es que el perito judicial desmonta punto por punto el informe realizado por el funcionario municipal, y concluye que la oferta más ventajosa en todos los aspectos fue la excluida. A su juicio, la oferta de la empresa pejina incurría en «anacronismos históricos cuando el pliego exigía lo contrario». Además «se valoraron aspectos que no eran valorables» y otros «se encuentran erróneamente valorados o no valorados cuando debían serlos», de manera que la oferta que debió recibir mayor puntuación fue la de Imago que «debió ser la adjudicataria del contrato». La sentencia subraya que no se trata de una mera apreciación subjetiva, sino que el perito judicial efectuó su valoración de acuerdo al pliego de condiciones y aspectos que el funcionario no tuvo en cuenta o valoró de forma errónea.
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