"¡Lo voy a quemar todo!"

Al grito de "¡voy a quemar el Ayuntamiento!", irrumpió ayer un hombre con su coche en la Casa Consistorial de Ampuero con la intención de quemar el vehículo y el edificio municipal. Vecino del barrio de La Bárcena (Ampuero), el conductor empotró primero su vehículo contra la puerta principal del edificio municipal y sacó enseres y un mechero con los que pretendía quemar el ayuntamiento. Afortunadamente, la rápida actuación de un policía local y de varios vecinos frustró sus intenciones.

El suceso se produjo en torno a las 9.45 horas de la mañana, momento en el que este vecino dirigió su vehículo contra la puerta del ayuntamiento, donde en ese momento se encontraba el personal laboral municipal, así como el alcalde y algunos concejales. El coche pasó entre los bolardos y se estrelló contra la puerta principal del edificio; posteriormente el conductor se bajó cargado con una bolsa que contenía latas llenas de disolvente y una mecha para prender fuego, así como un mechero.

Desde su casa, en la misma calle en la que se encuentra el ayuntamiento, Alicia Pérez escuchó el golpe del coche contra el ayuntamiento, ruido que la hizo salir para ver qué ocurría. Entonces "el tío se ha bajado, ha empezado a sacar cosas de una bolsa, ha abierto el depósito de la gasolina, ha metido cosas dentro y tenía un mechero", relataba ayer Alicia. Esta vecina llamó al Ayuntamiento para alertar a los que se encontraban dentro, como también hicieron otros vecinos avisando también a la Policía Local.

Una de las personas que ayudó a reducir a este hombre hicieron falta cuatro hombres para retenerlo fue Pedro Deza, que se encontraba tomando café en un bar próximo al ayuntamiento. Uno de los trabajadores municipales intentó primero razonar con el hombre, que estaba amenazando con quemar el Consistorio y después se acercó Deza, que conoce al atacante y le pidió que se tranquilizara. "Que los mato, quítate que le prendo fuego", le contestó con un mechero en la mano y un cordón de zapato ya introducido en el depósito de gasolina del coche.

En ese momento apareció "a todo correr" el policía local Alfonso Abedul, que se encontraba custodiando la entrada de los niños en el colegio de Ampuero cuando recibió el aviso, y se lanzó encima del hombre para evitar que ejecutara su propósito. Como si de una película se tratase, Abedul forcejeó con el vecino de La Bárcena, quien intentó resistirse, ya en el suelo, y tenía, según los testigos, una gran fortaleza. Finalmente otros tres vecinos el propietario de la pastelería que está frente del ayuntamiento, Deza y un viandante más ayudaron al agente para retenerlo hasta que lo consiguieron; pero no resultó fácil pues "nos ha costado un rato bueno aguantarlo, ofrecía mucha resistencia", como reconoció Deza.

Para esposarlo hizo falta la intervención del policía local del pueblo vecino de Limpias, ya que en la carrera del colegio al ayuntamiento Abedul perdió las esposas.

Elogios al policía

Todos los testigos del incidente han coincidido en que fue "muy rápido" y que no ha pasado nada gracias a la intervención del policía local y de los vecinos. Uno de los que ayudaron a detener al conductor aseguró que el hombre le decía a la gente "marchaos, que voy a prender el ayuntamiento" y también "se quejaba de que los guardias civiles no le dejaban en paz".

Una de las trabajadoras del Ayuntamiento relató que se dirigía al Consistorio cuando vio el coche empotrado y al hombre gritando que iba a "quemar el Ayuntamiento" y que además, "olía a gasolina". Para ella "el gran protagonista es Alfonso", en referencia al policía local, "porque le ha quitado del coche y el tío ya tenía el tapón quitado con una mecha para activarlo". Según la trabajadora "se podía haber armado la de Dios si no llega a ser por Alfonso".

En el Ayuntamiento, dijo, "hemos salido todos con miedo de que explotara" y afirmó que "el que diga que no ha habido tensión, está mintiendo". La testigo contó que desde la ventana ella se encontraba fuera gritó a una compañera que saliera "porque si explotaba...". Finalmente, señaló: "Aquí venimos gente a trabajar, pero no somos los que dictamos las cosas. Somos trabajadores que venimos a hacer un servicio público y no por eso tenemos que ser el objeto de esto".

El alcalde de Ampuero, Patricio Martínez, quiso destacar la rápida actuación del agente y también la colaboración de los vecinos que "entre todos han evitado que hubiese quemado todo". En el interior del ayuntamiento se vivió con gran revuelo el momento en el que este hombre intentó encender la mecha en el depósito de gasolina, ya que al empotrar el coche contra la puerta obstaculizó la salida, aunque después se pudo abrir la segunda hoja de la puerta y el edificio cuenta con salida de emergencia.