Los alcaldes quieren urbes en las que los ciudadanos sean los protagonistas

En el encuentro Futuro en español tuvieron ayer especial protagonismo cuatro alcaldes.Les invitaron a analizar hacia dónde van sus poblaciones y a pensar en cómo pasar del hablar al hacer para superar las desigualdades que alberga, habitualmente, ese espacio grande, pequeño o mediano siempre en movimiento. Fueron José Francisco Ballesta (Murcia), Daniela Chacón (vicealcaldesa de Quito, Ecuador), Aníbal Gaviria (que representó a Medellín, Colombia, de 2012 a 2015) e Íñigo de la Serna (Santander). Los cuatro expresaron una preocupación similar: las metrópolis del futuro han de ser inclusivas y el protagonismo debe estar en las personas, en los ciudadanos».

El alcalde cántabro explicó algunos de los proyectos que la capital tiene en marcha, haciendo hincapié en lo cerca que está ya la plataforma que será el centro neurálgico de la Smart City y en el plan para crear en el Barrio Pesquero un vivero de start ups (empresas de raíz tecnológica), entre otros. De la Serna avisó de que los jóvenes que crean una aplicación de la nada "están cambiando el panorama económico" a una velocidad nunca vista antes.

"Estamos viviendo un cambio de época", sumó Ballesta, para quien las cuestiones vitales son dos y están claras: "hay que saber de dónde venimos y también saber hacia donde vamos". Raíces y alas, llaman en Murcia a su planteamiento parafraseando el aforismo de Juan Ramón Jiménez que se resume "en potenciar su historia, sus tradiciones, su cultura y sus tradiciones" y aceptar que "todo lo demás es móvil". Por eso tiene en marcha un modelo Smart con cuatro patas (Comunica, Resuelve, Abierto y Sostenible) que sirve para establecer una relación bidireccional "con las personas, porque el motor no son las nuevas tecnologías, sino la gente".

"Herramienta transformadora"

Aníbal Gaviria ve a la ciudad como una "herramienta transformadora". El cambio de Medellín se estudia hoy en las grandes universidades como ejemplo de buena práctica. Porque en 1991, el índice de pobreza extrema estaba en el 19% y su nivel de homicidios la colocaba en puestos de honor en el ranking de las ciudades más peligrosas del mundo. "Tanto la violencia como la inequidad estaban en niveles asfixiantes", contó Gaviria. Sin embargo hoy, con una fórmula simple en la superficie (equidad = educación + espacio público) y a base de innovaciones consistentes en aprovechar de forma distinta tecnologías ya existentes como los teleféricos aplicados al transporte público Medellín ha recuperado grandes zonas verdes y ha conseguido salir del listado de ciudades más violentas. También se ha bajado la tasa de pobreza extrema al 2,8%. "El modelo es el de ciudad para la vida", expuso.

Daniela Chacón, vicealcaldesa de Quito, resaltó los cambios que se están introduciendo en la capital de Ecuador en todo el sistema de movilidad. Pero una de las grandes prioridades, al rediseñar, está siendo la seguridad "para todos", también para las mujeres, porque si no son para todos, los cambios "no tendrían sentido". "Las mujeres no van por calles sin luz", aseguró. Y no se trata solo de invertir en infraestructuras, "se trata de entender todos los factores sociales para que las mejoras lleguen a todos".

Chacón cree que hay muchos objetivos de la Nueva Agenda Urbana (que se decidirá en su ciudad en noviembre) "realizables. Aunque se requiere colaboración ciudadana".