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Lola Gallardo
Jueves, 7 de julio 2016, 09:30
Desvelar es descubrir. Y eso es lo que distintos artistas urbanos han realizado en cincuenta puntos de Santander. Dejaron sus huellas, su propio lenguaje y su particular forma de ver el mundo. Desvelarte es un festival en el que distintos artistas decoran paredes y muros ... de Santander. En esta edición el dúo Den_XL&Jank trabaja en la calle El Lábaro, mientras Pixel Pancho lo hace en la calle Menéndez Pelayo y el artista extremeño Daniel Muñoz San, en la calle San Sebastián. El alcalde de Santander, Íñigo de la Serna; el director de la Fundación Santander Creativa (FSC), Marcos Díez y representantes de ACAI presentaron ayer esta iniciativa, mientras San trazaba su dibujo sobre un edificio de la calle San Sebastián. Su mural habla de la jerarquía, de los poderes que vigilarán Santander desde un edificio situado en una de las zonas más altas de la ciudad, aunque se centrará más en la clase baja. ¿El motivo? Es difícil acceder a la parte alta de la fachada con la carretilla elevadora y hay ventanas donde no se puede dibujar. Por eso, deberá centrar su trabajo en la parte media-inferior. Son los gajes del oficio, la improvisación manda. San trabaja sobre los elementos que se ha ido encontrando sobre el terreno. «Esto no es un papel en blanco o un lienzo, no es trabajar en un estudio, es un espacio exterior con sus pros y sus contras», señala.
Hace más de veinte años que comenzó con grafitis y aquí empezó su interés por la pintura y el arte. «A medida que vas creciendo, buscas nuevos objetivos, como en cualquier profesión», indica. Y así llegaron los murales hace doce años. Acaba de regresar de la ciudad francesa de Besançon, pero viaja al pasado y recuerda que comenzó su carrera artística pintando las paredes de su pueblo natal, Moraleja, en Cáceres. Tras varios años como autodidacta comenzó a estudiar Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid. Llegaron sus primeras exposiciones e intervenciones murales. La mayoría, el 80%, reconoce que son en Europa, porque en España todavía no está muy desarrollado el arte urbano. Huye de la etiqueta de arte urbano y señala que para él es arte, con mayúsculas. «Yo empecé en mi pueblo, con 6.000 habitantes, por eso digo que la etiqueta de urbano suena bien, pero es arte sin más», indica. Eso sí, con las dificultades que conlleva el trabajar en un espacio público y que otras disciplinas del arte contemporáneo no tienen. Se trata de trabajar en la calle, desprotegido, no en un estudio. En este caso, el no poder acceder a una parte de la pared supone cambiar la idea inicial sobre la marcha e improvisar. «En el estudio rompes el cuadro y empiezas otro, aquí no puedes hacer eso», insiste. Y es que para él, «el arte urbano no son matemáticas». El no poder llegar a un espacio determinado te obliga a seguir otro camino. «Lo que falta por un lado lo equilibras por otro».
Desde sus inicios, su obra ha sido figurativa debido a que comenzó a desarrollarse usando, exclusivamente, el espacio público como soporte. Y así, hizo reconocibles sus mensajes entre el mayor número de personas posibles, sin discriminaciones socio-culturales. Su lenguaje está formado por símbolos y códigos que suscitan una lectura cuidada, entre la narrativa de la pintura clásica y los discursos sociológicos del arte contemporáneo. Trabajar en Santander no le ha resultado difícil y es que San ya conocía la ciudad. Vivió en Madrid con santanderinos, que residían cerca del funicular del Río de la Pila. El conocer el terreno y la forma del edificio o su emplazamiento, sobre el mar, le ha ayudado en su inspiración. «Es una zona elevada sobre el nivel del mar, que provoca en mí una serie de metáforas que aparecerán en la pintura final», explica. San señala que no para de trabajar. Ahora prepara una exposición individual en Cáceres, su localidad natal, y proyectos en Canarias y Lisboa. Todas las obras de San obligan al espectador a caer en interpretaciones diversas y confusas, a pesar de narrar hechos y anécdotas cotidianas basadas en los tópicos más mundanos.
Desvelarte y más
En esta octava edición del Festival Desvelarte, el objetivo de la Fundación Santander Creativa se mantiene en sacar la cultura y el arte a la calle. Así lo resumió ayer Íñigo de la Serna, para quien las más de cincuenta intervenciones realizadas en Santander aportan un «grado de frescura y modernidad» a la ciudad.
Además de San, los artistas Den_XL&Jank (dúo formado por la creadora vasca Eva Mena y el santanderino Jimmy Jank), terminarán este fin de semana su intervención conjunta en la calle El Lábaro, tomando el relevo a la doble propuesta planteada por Serzo y Okuda el año pasado. Además, habrá un ciclo de charlas coloquio titulado Soy calle, que coordina Marta Mantecón. En este ciclo intervendrá el viernes Majo G. Polanco, que hablará sobre Calle arriba, calle abajo. En ella, hablará sobre la situación de los barrios en las ciudades y las consecuencias de los procesos de gentrificación.
Otra de las actividades estrella es el mapping (mapeo urbano) que tendrá lugar el sábado, de 18.00 a 19.00 horas. Un programa diseñado por Ana Álvarez y Alicia Riva para descubrir el arte urbano de Santander.
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