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yexus
Miércoles, 23 de noviembre 2016, 07:25
Algunos proceden de Gran Bretaña y todos cuentan con importantes premios que los avalan; la popularidad les llegó gracias a la calidad de su trabajo en las principales cabeceras de la industria norteamericana del comic-book. Sin embargo, estos guionistas también desarrollan obras de autoría propia y personajes ajenos a las franquicias de turno. La mayoría han dejado su singular impronta en el campo de los superhéroes pero brillan especialmente por sus renovadores y personales proyectos, normalmente materializados en series independientes y a menudo argumentalmente próximos a la ciencia-ficción más original y renovadora.
Mark Millar es hoy por hoy el guionista anglosajón de referencia, un prolífico y fértil escritor capaz de convertir sus ideas en éxitos que a menudo se transforman en superproducciones fílmicas. Ejemplo de ello son obras como Kick Ass, Wanted o Kingsman, a las que cabe sumar asombrosas propuestas como The Authority o Nemesis. Además de la recién publicada MPH, título que introduce una premisa fantástica en el mundo real del crimen y la crisis económica. Warren Ellis, por otra parte, es un visionario especialmente preocupado por las redes sociales, las nuevas tecnologías, las conspiraciones y el poder de la fabulación, como bien demuestra en los aclamados Planetary, Global Frequency y, sobre todo, Transmetropolitan, toda una declaración de principios. Inyección es otro buen ejemplo, una singular historia de suspense sobre una utopía científica de resultados tan inciertos como peligrosos.
Bryan K. Vaughan, a su vez, es el responsable de la multipremiada Saga pero también de una serie tan original como Y. El último hombre. Paper Girls es una propuesta muy fresca en torno a cuatro adolescentes que viven una fantástica aventura ambientada en los años 80.
La dura realidad
Greg Rucka es el autor de las populares novelas sobre el guardaespaldas Atticus Kodiak e igualmente de títulos como Queen & Country o Whiteout, que mereció una adaptación cinematográfica. Lazarus es su última serie, una fábula sociopolítica donde el futuro depende de un grupo selecto de familias que controlan el poder y la economía del mundo.
Y cierra esta relación el nombre de Jason Aaron, que ha participado en Hellblazer, además de crear títulos como Southern Bastards, 24 Seven y, especialmente, la celebrada Scalped. La herencia de la ira es su obra más reciente, una reflexión sobre la reproducción de las conductas violentas a nivel familiar narrada en clave de género negro.
'MPH'
Millar combina de nuevo el entretenimiento de primer orden con el despliegue de originales ideas y un desarrollo de las mismas escasamente convencional. La historia incide en unos delincuentes de poca monta a quienes una droga experimental permite correr a velocidades insólitas. Pero la escasez de la misma divide las posibilidades de uso entre el crimen, la venganza y la justicia social. Además, ¿qué ocurrirá al traspasar los límites de la velocidad y del tiempo? Fegredo aporta espectacularidad y una puesta en página impecable, cuyo extremado realismo no es óbice para que la asombrosa descripción gráfica de la velocidad extrema pueda ser contemplada desde el subjetivo punto de vista del corredor.
'Inyección'
Ellis es amigo de urdir tramas que escapan a lo convencional y fusionan la más cruda realidad con una sofisticada fantasía. En este caso, se centra en una oscura agencia gubernamental dedicada a investigar recursos más allá de la realidad conocida. Sus componentes son un mago blanco, una experta en informática, un especialista en ética y lógica, un agente del MI6 y una doctora que pasa largas temporadas en el manicomio. El argumento contiene agendas ocultas, crímenes, suspense, tecnología y magia. Está plasmado con un dibujo sobrio y funcional, al servicio de una narración elíptica que exige la colaboración del lector ¿Qué es la Inyección y por qué desgarra el frágil equilibrio del planeta?
'Paper Girls'
Remontándose a unos años 80 ya idealizados, Vaughan plantea una aventura juvenil donde cobra la misma relevancia el suceso fantástico que la descripción de los personajes y sus sólidas relaciones. Cuatro chicas de 12 años que se dedican a repartir periódicos de madrugada asisten a un extraño incidente que involucra a viajeros en el tiempo y presuntos alienígenas. Como una versión realista de Los Goonies, la emoción y la sorpresa presiden esta frenética peripecia que se desarrolla casi en tiempo real. Con un grafismo realista repleto de elegancia y encanto, Chiang desarrolla una historia de amistad y coraje ambientada en los tiempos de Chernobyl, Freddie Kruger, los casettes y Ronald Reagan.
'Lazarus'
Rucka imagina aquí un futuro imaginario pero no del todo improbable. Ya que el mundo está en manos de grandes clanes familiares que detentan el poder, el dinero y los medios de producción. Una plutocracia de estirpes inflexibles que compiten por el territorio manteniendo un sistema casi feudal de vasallaje donde la mayoría de la población trabaja para mantenerlos. Y cada familia tiene su propio Lazarus, un defensor creado biológicamente con poderes físicos optimizados. La de los Carlyle se llama Forever y de sus conflictos emocionales y las luchas por el poder trata esta serie que llega a su tercer tomo recopilatorio, un espléndido thriller de ciencia-ficción con ingredientes sociopolíticos.
'La herencia de la ira'
En clave absolutamente realista, Aaron escribe un thriller descarnado y costumbrista que especula sobre las raíces del mal. La estirpe de los Rath está marcada por la violencia desde que el bisabuelo Isom acuchilló a un vecino en 1901 tras discutir por unas ovejas. Ira es su actual descendiente, un hombre que está muriendo de cáncer pero sigue siendo un asesino sin entrañas. Y ahora su hijo Ruben está a punto de convertirse en un delincuente ¿O será capaz de cambiar el destino de la familia? Garney despliega un realismo áspero y mantiene un ritmo cinematográfico basado en su trepidante sentido del montaje, a la hora de dibujar este sangriento relato ambientado en el corazón del profundo Sur.
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