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Rosa Ruiz
Sábado, 3 de junio 2017, 15:59
Recién llegada de Amsterdam donde ha acudido a presentar la película Tarde para la ira en el Amsterdam Spanish Film Festival, la actriz Ruth Díaz (Reinosa, 1975) regresa hoy a Cantabria para recoger el Premio Futuras Estrellas del Festival Internacional de Cortometrajes de Torrelavega. Un galardón que le hace mucha ilusión, según cuenta, porque se lo conceden en su tierra y porque el cortometraje con el que debutó en la dirección Porsiemprejamón, recibió el Premio Dobra, al mejor corto argumental de autor cántabro, en la pasada edición.
Reconoce que en estos últimos meses «no ha parado», su trabajo como mujer golpeada por la vida en Tarde para la ira, la ópera prima de Raúl Arévalo, ha recibido distintos premios, entre ellos el Feroz y el de mejor interpretación femenina en la sección Horizontes del Festival de Venecia, así como la nominación a la Mejor Actriz Revelación en los últimos Goya. Además ha vuelto a los escenarios y ha tenido la posibilidad de trabajar en teatro, una de sus grandes pasiones pues «es donde me he criado como actriz y lo que me trajo a Madrid para buscar trabajo», según confiesa.
La entrega de premios y el reconocimiento a actores como Emilio Gutiérrez Caba, Ruth Díaz y Ángel de Miguel marcará esta noche, a partir de las 20.00 horas, la gala de clausura del Festival Internacional de Cortometrajes de Torrelavega.
Será una fiesta del cine en la que se desvelerán los tres mejores trabajos presentados en esta edición, así como las mejores interpretaciones, los mejores documentales, comedias y animaciones.
A la gala acudirán entre otros invitados Mario Camus, Tony Isbert, Xavier Elorriaga e Iñaki Guevara, presidente de la Unión de Actores y Actrices
«A finales de marzo acabamos la temporada de Demonios en el Teatro Galileo de Madrid y en mayo hemos recuperado durante cinco días en el Bellas Artes la obra Aquiles. El hombre que estrenamos el año pasado en el Festival de Mérida», explica.
En marzo, además, acabó de rodar Bajo la piel del lobo,un drama con ecos de western dirigido por Samu Fuentes protagonizada también por Mario Casas. Así que ahora, según dice, tiene unos meses de parón en los que aprovechará para recuperar uno de sus proyectos, la dirección de un largometraje que llevará por título La memoria del olvido. Se trata de un proyecto que tengo en mente mucho antes de todo esto y que está bastante avanzado», recuerda. Además seguirá acudiendo festivales como el que le ha llevado esta semana a Holanda, «y haciendo un poco de vida normal con mi hija, que ya lo necesitaba también».
Sin embargo, señala que está encantada con todo lo que le ha vivido desde su participación en Tarde para la ira y que aunque ha pasado poco tiempo ha recibido muchas más llamadas para ofrecerla trabajo. «Me ha dado una mayor visibilidad como actriz y sí he notado más movimiento y un gran cambio con respecto a como estaba antes de trabajar en esa película, pero claro esto no es una panacea porque claro somos muchos actores y por desgracia no hay trabajo para todos».
Recientemente estuvo en Cantabria en el festival Piélagos en Corto, como jurado de la sección Uno corto y rapidito que consiste en hacer un cortometraje en una semana y repite que se toma con una gran alegría volver hoy a Torrelavega. «Que reconozcan tu trabajo en casa es una de las cosas que más ilusión puede hacerte. De verdad que da una inmensa alegría comprobar que a la gente le gusta lo que haces».
No necesita mucho tiempo para pensar que deseo quiere cumplir en lo que queda de 2017. «Que no me falte trabajo, proyectos interesantes y personajes que tengan chicha», pues a la hora de trabajar la mueven más los proyectos que otras cosas como los nombres de los directores. «Con todo lo que me gusta el teatro, confieso que ahora mismo tengo puesto el ojo en el cine. Así que lo que más me gustaría es trabajar en una película. Con una protagonista femenina importante».
Tras su trabajo en series de televisión como MIR, Hospital Central, Cuéntame un cuento o El comisario se le pregunta si le gustaría volver a la pequeña pantalla. «Pues también me apetecería trabajar en una serie, porque es un medio que te proporciona cierta estabilidad ya que normalmente suponen muchos meses de grabación. Pero te repito que somos muchos actores y está complicado».
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