«Actualmente el bailarín de danza española es el más completo del mundo»

- Presentan 'Querencia' como un viaje por los distintos estilos de la danza española. ¿A dónde va a llevar al público esta noche?

-En 'Querencia' habrá danza estilizada, escuela bolera, folclore, danza tradicional española y flamenco. Mi trayectoria se ha caracterizado por unir diferentes géneros musicales como tango argentino, danza oriental, blues, jazz o soul con la danza estilizada y en este momento me encontraba con muchas ganas de volver a nuestra tradición, de ahí el nombre de 'Querencia', en este caso del origen, pero presentado de una manera muy actualizada.

-¿El público va a entender ese viaje por sus raíces?

-Todas mis creaciones están basadas en que el público no tenga que ser un experto para disfrutarlas. Si lo eres, seguro que lo aprecias más, porque hay un gran trabajo técnico, pero si no ha ido nunca a un espectáculo de este tipo creo que lo disfrutará ya que está concebido para emocionar.

-Ha pedido en multitud de ocasiones una mayor visibilidad para la danza española. ¿Cómo va esa reivindicación?

-Vamos ganando algunos puntos. Yo solo puedo hablar de mi trabajo, tanto al frente del Ballet Nacional de España como fuera de él. Siempre he sido un obsesionado de dar visibilidad, y así lo hice con 'Un país en danza', mi programa de La 2 de TVE, y abriendo la danza a muchísimas disciplinas artísticas diferentes como la música, el deporte. Incluso he llevado la danza a museos como El Prado o el Thyssen porque creo firmemente que es necesario involucrar la danza a situaciones que van más allá de las meras representaciones en un escenario.

-¿No hay ningún pero?

-Los hay. Necesitamos más visibilidad en los medios de comunicación. No se puede querer lo que no se conoce y estoy seguro de que si se pasasen este tipo de espectáculos en televisión habría muchas más ganas de ir a verlos.

-Su trayectoria es muy larga tanto en su propia compañía como en la nacional. Si echa la vista atrás ¿cómo ha evolucionado?

-Mi evolución ha estado muy ligada a la ilusión. Mantengo la misma que cuando en el año 2000, hace ya 23 años, creé mi propia compañía. Ahora estoy coreografiando una ópera, 'Ainadamar', en Cardiff', en Gales, y afronto este proyecto con el mismo miedo y la misma incertidumbre. Y no quiero que se me pase porque hace que me sienta activo.

-La suya fue la primera compañía de danza que actuó en España tras el confinamiento. ¿Cómo recuerda aquella jornada?

-Fue superespecial. Ver a mi compañía bailar con tanta fuerza y sensibilidad en el Teatro del Generalife de Granada con reducción de público y mascarillas después de todo lo que vivimos aquellos meses ha sido, y creo que será, uno de los momentos más especiales de mi carrera.

-Se suele preguntar a las grandes figuras qué recomendarían a los jóvenes que quieran seguir sus pasos. ¿Cuál fue el mejor consejo que recibió usted?

-He tenido la suerte de que siempre me han presentado la realidad. Nunca me dijeron eso de que la danza es maravillosa y que expresarse a través del movimiento es lo más. Que lo es. Pero lo que siempre me han recalcado es que si me quería dedicar a esto tenía que tener en cuenta que es una disciplina hipersacrificada y que gran parte de la juventud y de los contactos se pierden porque hay que machacarse con el baile al mismo tiempo que se estudia. El cuerpo es nuestro instrumento de trabajo con todo lo que eso conlleva y hay que empezar a tomar importantes decisiones a una edad muy temprana, trabajar desde joven y la carrera se va a terminar también pronto. Pero lo más importante para mí ha sido que mi relación con la danza y lo que me aporta es tanto que todos estos consejos, que son absolutamente veraces, quedaron en un segundo plano. Lo que a mí más me ha enseñado la danza es que si algo te llena todo lo que hay en contra te compensa.

-¿Cómo es la preparación de un bailarín danza española?

-Actualmente el bailarín de danza española es el más preparado del mundo y así lo defiendo siempre. Tiene que tener la misma preparación que la de uno de danza clásica y una base técnica increíble. Además debe defender la escuela bolera que es uno de los estilos más difíciles que existen. A esto hay que sumarle que tiene que poseer un toque muy virtuoso de castañuelas. Además hay que saber darle tu propio carácter a la pieza: los quiebros de cintura, el movimiento de hombros, piruetas, saltos... Todo lo que se hace en la escuela bolera se hace actualmente con una gran exigencia a nivel de un gran bailarín de ballet clásico. Tiene que saber defender todos los estilos del folclore español, que es de los más complejos del mundo, con danzas que necesitan años para ser dominadas como la muñeira gallega, el aurresku del País Vasco, la jota aragonesa., el flamenco .. y así pasando por todo el territorio español y todo ello, con sus zapatos, botas, trajes, correspondientes. A todo esto se suma que está habiendo una gran integración de la danza contemporánea en la española.

-Una faceta suya es la de coreógrafo de patinaje artístico.

-El patinaje artístico me ha gustado desde pequeño. Casualmente en el año 2000, la pareja francesa que era campeona del mundo sobre hielo (Marina Anissina y Gwendal Peizerat) me pidió que les coreografiada un programa de flamenco. Me pareció muy complicado porque el flamenco es todo peso escénico y el patinaje es muy etéreo, pero les dije que sí. Trabajamos durante dos años y ganaron la medalla de oro de los juegos olímpicos. A partir de ahí he tenido la suerte de trabajar con los mejores patinadores del mundo. Me encanta y humildemente creo que se creó una ante y un después en este tipo de coreografías.