«Hemos aprendido que la vida es riesgo y no se puede luchar contra la naturaleza»

-Vuelven a los escenarios y lo hacen por todo lo alto. ¿Cómo se sienten con su regreso?

-Nos sentimos bien porque el estado natural de un teatrero es pisar el escenario. Sentimos que las cosas están volviendo. Después de una situación en la que te ves privado de tu medio de trabajo, el poder volver en buenas condiciones, arropado con el cariño y apoyo de tu público y de las instituciones es una satisfacción añadida.

-Han asegurado que este es el inicio de una nueva era para La Teatrería. Incluso que se trata de una «refundación». ¿En qué se va a diferenciar esta nueva etapa de la anterior?

-Nuestra idea es volver a replantear la actividad que hacíamos en La Teatrería pero tratando de buscar horizontes nuevos. Hasta ahora estábamos persiguiendo unos objetivos y vamos a tratar de aglutinarlos para poder presentar espectáculos que de alguna forma refuercen la idea de lo alternativo, del riesgo y de lo minoritario.

-¿Por qué han escogido 'La novia del viento', un montaje de producción propia, para retornar al Palacio de Festivales?

- 'La novia del viento' es uno de los espectáculos más emblemáticos de la compañía en los últimos años. La protagonista de la historia, Leonora Carrington, renació en Santander personal y artísticamente, ya que vino aquí casi desahuciada por sus padres. Pretendían hacer desaparecer su personalidad. Ella consiguió no solo mantener su creatividad, además salió reforzada en su visión del mundo. Por eso, actuar en la ciudad que marcó la vida de la protagonista, nos parecía muy significativo. Como un resurgimiento.

-Uno de los aspectos más característicos de su compañía es la internacionalidad. ¿Podrán recuperarla este 2022?

-En el festival que organiza La Teatrería en marzo, 'Solo tú', estarán varios países representados. Por ejemplo, Brasil, México, Bélgica, Francia... Más de la mitad de los espectáculos van a tener una dimensión internacional importante.

-Las inundaciones del pasado noviembre han sido las más duras para su sala, pero ya habían sufrido otros episodios similares. ¿Cómo plantean esta nueva etapa para que no se vuelva a repetir?

-La vida es riesgo. Y aquí el riesgo es inevitable. No se puede luchar contra la naturaleza. Creo que eso es una lección que hemos aprendido de manera dura y contundente. Lo único que podríamos hacer es irnos. Esta casa está construida sabiendo que se puede inundar y, además, le han afectado varias riadas. Lo que ocurre es que no es lo mismo que el agua te llegue al tobillo a que te llegue al cuello, como en noviembre. No tenemos alternativa. Tratar de conseguir que los daños sean los menores posibles, ese sería el objetivo respecto a lo que pueda ocurrir en el futuro.

-Los espectadores de su espacio se volcaron con su reconstrucción desde el inicio ¿Cómo van a responder a esa solidaridad?

-Sí. Fue toda una declaración de amor por su parte. Queremos empezar antes del festival 'Solo tú', una programación especial el primer fin de semana de marzo. Espectáculos propios para responder a esa solidaridad y fortalecer la relación con el público.

- ¿Qué montajes protagonizarán la reapertura de La Teatrería en esa programación?

-Van a ser espectáculos propios de Ábrego escritos por los autores que colaboran habitualmente con nosotros: Fernando Madrazo, Áureo Gómez, Pablo Escobedo, Antonio Fernández, Rebeca García, Carmen Bartolomé, Pilar Revuelta... Es una forma de visibilizar el músculo de la Teatrería. Nosotros somos la cara visible pero formamos un equipo con mucha gente detrás.

-¿Y cómo respondió el resto de grupos de teatro de Cantabria ante su situación?

-A pesar de no haber recibido una respuesta explícita, sí sabemos y nos consta que esa solidaridad que ha manifestado el público, también la han manifestado los compañeros. Ha habido respuesta de varias compañías y varias salas. No hace falta tanta explicitud porque creemos que se da de forma natural, y consideramos que contamos con el apoyo de los compañeros sin duda.

-¿Cómo ve el futuro del teatro en Cantabria?

-Mira, llevamos muchos años desarrollando la actividad teatral aquí en Cantabria y no vemos el futuro ni bien ni mal. Vivimos en una Comunidad muy pequeña y que tiene unas limitaciones en muchos ámbitos. La única manera de vencer esas limitaciones es la genialidad. Esa genialidad está por encima de cualquier limitación, pero claro, no todos somos geniales, ni todos ni prácticamente ninguno. Con lo cual, tenemos que desenvolvernos en un plano de supervivencia. Ni optimismo ni pesimismo.

-¿Qué opina del perfil cultural que está adoptando la capital cántabra?

-Me genera dudas ese nuevo perfil del que hablas porque se refiere sobre todo a infraestructuras, que están relacionadas con las artes plásticas. Realmente no sé si eso es suficiente para decir que estamos en un desarrollo cultural óptimo o que tengamos unas expectativas amplías. Hay artes vivas que no se van a beneficiar de esa nueva situación.