El artista David Ferreira recala por primera vez en España a través de Inder Espacio

Su obra y su carrera pueden recordar la influencia de Basquiat en ciertos puntos, fuente de inspiración para Ferreira que no olvida hacer referencia a él en sus obras. Sus pinturas se reconocen además por su número fetiche, el 15. El artista «asocia con destreza la rigurosidad matemática de su antigua vida, al alboroto vibrante de su inspiración». De hecho, los fondos lisos de colores se mezclan con las ecuaciones y los rompecabezas matemáticos. Su obra entera es una biografía puesta en pintura. Ferreira se convierte en Toto, el personaje de su infancia. «Un cómic donde el protagonista es un niño travieso que saca malas notas. Le descubrimos con su mujer. Le representa a la manera de Andy Warhol o en una fiesta llena de globos de colores». Su estilo evoluciona así pasando de lo abstracto a lo figurativo, desde tonos tenues al júbilo del color. Su técnica seduce nuestra mirada «y nos impulsa hacia un universo feliz, colorido y nos llena de un optimismo contagioso».

Sin duda, los materiales se mezclan con los colores y alimentan las formas geométricas. El artista acaricia el pincel contra una paleta , un cuchillo o simplemente utiliza sus dedos si las ganas se hacen sentir. Muy activo delante de su lienzo, «necesita ver las cosas con perspectiva, dejar expresar su gesto y es por esa razón que prefiere los grandes formatos permitiéndose más libertad». La exposición se inaugura hoy a las siete de la tarde.