Una atracción natural

Es uno de los elementos más captados en el mundo fotográfico. Su magia, sus colores, sus reflejos, su bravura, su calma, su conexión con el ser humano y el resto de la naturaleza, lo hacen especialmente atractivo para profesionales y aficionados a la imagen. Y el agua, imprevisible en tantas ocasiones, siempre responde al objetivo. Así ha sucedido en el primer concurso de fotografía medioambiental organizado por el Instituto de Hidráulica de la Universidad de Cantabria (IH), en el que los participantes tenían que reflejar en sus imágenes los espacios naturales del litoral de la región, en concreto el Estuario de Tina Menor, la Ría del Capitán, las Marismas del Joyel y la Laguna de Victoria, que son las cuatro áreas de trabajo en las que opera el proyecto ‘Convive-Life’.

Casi un centenar de fotografías se han presentado al certamen, que ha conocido esta semana a sus ganadores: Laura García, con ‘Puente Medieval (Laguna Victoria)’, y Eduardo Suárez, gracias a ‘El Sable de Tina Menor’. García fue seleccionada por un jurado designado al efecto y se embolsará un premio de 500 euros. Los otros dos finalistas fueron Sergio Mantecón, por ‘Chapoteando’, y Javier Bustamante, por ‘Cenital embarcación ría de Oyambre’, que se embolsarán 100 euros cada uno. Por su parte, Suárez se alzó con la victoria en la categoría popular, gracias a los votos registrados en la web puesta en marcha para este concurso. Su premio asciende 300 euros.

Una treintena de las fotografías presentadas a concurso formarán parte de una exposición itinerante que iniciará su recorrido en la Casa de las Mareas de Arnuero. Allí se mostrará entre el 26 de octubre y el 30 de noviembre. Posteriormente, la muestra se exhibirá en el Centro de Interpretación del Parque Natural de Oyambre, en el mes de diciembre; el Centro de Interpretación del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, en enero; la antigua estación de ferrocarril de Puente Viesgo, en febrero; y la Sala de Exposiciones del Centro Penitenciario del Dueso (Santoña), en marzo.

Este certamen, que estaba dirigido a fotógrafos profesionales o aficionados mayores de 18 años, tenía como objetivo hacer más visible el propósito del proyecto ‘Convive-Life’, que pretende hacer frente a la problemática de la integración de las actividades humanas en los objetivos de conservación de la Red Natura 2000 en los estuarios de Cantabria, a través de la implementación de actuaciones de restauración ambiental y concienciación ciudadana del valor de dichos ecosistemas.

Los estuarios son sistemas de gran importancia biológica y socioeconómica que están fuertemente afectados por presiones antropogénicas tales como la presencia de diques, ya sean para ganar terreno al mar o para la explotación de recursos naturales, el vertido de aguas residuales, la eutrofización del medio y la presencia de especies invasoras.