La Escuela de Verano de la Academia de Artes Escénicas recala en Santander

«La Escuela de Verano forma parte del activismo cultural, que es fundamental –afirmó la actriz– Es un rincón en el mundo, que en julio será Santander, en el que ese activismo, desde el respeto absoluto a las artes escénicas es posible». Esa posibilidad toma forma «a través del debate, de la formación, de la adquisición de conocimiento y la convivencia entre diferentes generaciones».

Guillén Cuervo estuvo acompañada en la presentación de la actividad del vicepresidente y consejero de Cultura, Pablo Zuloaga y el rector de la Universidad de Cantabria, Ángel Pazos.

La propuesta formativa y vivencial en torno a las artes escénicas se incluye en el programa de los Cursos de Verano que la UC reparte por diversos puntos de la comunidad. La Cultura se convierte así en un elemento a reivindicar, «como clave de nuestra vida, de nuestra actividad, de nuestra capacidad de reflexión, pero también como motor en todos los sentidos», resaltó Pazos. Un argumentario que compartió Zuloaga, defendiendo el valor de la Cultura como resorte económico, «generador de empleo que impulsa la actividad de otros sectores como la hostelería o el comercio y que es una respuesta al turismo estacional».

La Filmoteca de Cantabria será la sede principal de Escuela, que en algunos casos, se trasladará a la Sala Pereda del Palacio de Festivales, con actividades teórico- prácticas planteadas para las cuatro jornadas.

Bajo la denominación de 'Diálogos', los participantes podrán charlar con Lluis Pasqual y Helena Pimienta, directores de escena o Esther López Sobrado, investigadora y biógrafa de Santiago Ontañón. No en vano, ya que la figura de Ontañón sobrevolará todo el encuentro. El escenógrafo y dramaturgo santanderino será protagonista de una conferencia y una lectura dramatizada de 'El Saboteador', que dirigirá Francisco Valcarce.

Los talleres se dividirán en sesiones de 'Interpretación', 'Creación Escénica' y de 'Plástica Teatral'. En ellos, la experiencia de Pepe Viyuela, Jordi Forcadas, Laila Ripoll o Pedro Moreno, servirá como espejo en el que los jóvenes alumnos puedan mirarse.

Esa transmisión de vivencias entre profesionales es uno de los ejes fundamentales para esta Escuela de Verano. «Poder entrelazar esos conocimientos y desarrollar esa convivencia es lo que se propone la Academia», indicó su directora, quien apeló a la memoria de sus propios padres, Fernando Guillén y Gemma Cuervo, «a su generación, que con su ejemplo y su activismo cultural en plena dictadura, consiguieron que nuestra democracia pudiera caminar con cierto oxígeno».

Esta cuarta edición tiene como novedad, según destacó Guillén Cuervo, «poner el foco en las artes escénicas como motor de cambio social». Para lograrlo, la Academia ha querido colaborar con entidades que están «a pie de calle». Xanfrá, Centro de música y escena del Raval, Forn de Teatre Pa'Tothom o el Centro cultural 'Espacio Afro', estarán representados por docentes de cada una de esas compañías.

Con la mirada puesta en las diversas artes escénicas, habrá también espacio para la danza de la mano del coreógrafo Antonio Najarro.

La representación de 'El retablo de San Cristobal' por la compañía Nao D'Amores y la proyección del documental , 'Lola Herrera. Ser actriz. El despertar de una pasión', de Daniel Dicenta, completan las 50 horas de formación planificadas. El coste de la Escuela de Verano, que oferta 60 plazas, es de 100 euros y la inscripción puede realizarse a través de su propia página web.

«El hecho artístico –concluyó Guillén Cuervo – es algo litúrgico, intocable, para poder ser un poco más libres, o cambiar el punto de vista y eso es lo que venimos a poner en valor desde la Academia».