
Afinar y desafinar
Groucho ·
Lo academicista, la frialdad frenan toda posibilidad de conmoción y vértigo. La ansiedad y la presión se enuncian pero realmente nunca se revelanSecciones
Servicios
Destacamos
Groucho ·
Lo academicista, la frialdad frenan toda posibilidad de conmoción y vértigo. La ansiedad y la presión se enuncian pero realmente nunca se revelanLo del piano en el cine es una relación de amor y odio tan fructífera como desigual. En los últimos años curiosamente, desde prismas muy ... diferentes, la proliferación de títulos ha sido hasta sorprendente. Ahora en esta caótica cartelera de verano recala 'El concurso de piano', más interesante que lograda, resultona más en lo sonoro que en lo visual y poco atrevida a la hora de adentrarse en el drama interior que con contención y excelencia encarna su protagonista Taeke Nicolaï.
Año 2023
País Bélgica
Dirección y guion Dominique Deruddere
Reparto Taeke Nicolaï, René Vanderjeugd, Kevin Janssens, Ruth Becquart
Género Drama
Un filme que en lo que atañe a lo competitivo y al cuidado musical podría haberse rodado en Santander en los años de plenitud de su Concurso Internacional. En ese terreno sembrado por el piano en la pantalla asoman desde 'La clase de piano' de Ludovic Bernard; 'El pianista' de Polanski; 'Grand piano' de Eugenio Mira; 'El piano' de Jane Campion; 'La leyenda del pianista' en el océano de Tornatore' y hasta 'La pianista', de Haneke, aunque esta parece tocar en otro mundo.
Ahora el belga Dominique Deruddere, siempre interesante pero irregular, cineasta que debutó con la excelente 'Crazy love' y que ha rodado títulos como 'Espera la primavera, Bandini', se adentra en el retrato de una pianista inmersa en una escalada competitiva, siempre en la línea roja entre el éxito y el fracaso, arrastrando traumas y obsesiones entre partituras y búsquedas personales. Es un filme que discurre entre dos tiempos y tempos, el del pasado y el presente, el de una conducta compleja y una intérprete que participa tanto de la pasión como de la enfermiza perfección. El retrato de la residencia de intérpretes adopta una atmósfera casi de thriller y de enigma, pero sin mucha convicción. Más intensa y lúcida es la cercanía y la intimidad sufriente de la joven, gracias más a Nicolai que a la dirección del cineasta de 'Banquete de boda'. Ambientada en el prestigioso concurso internacional Queen Elizabeth, la cinta se recrea tanto en la hipérbole dramática de los jóvenes pianistas, más cerca de una secta que de una comunidad de artistas, que parece tejer los mimbres de una película de terror. En el equilibrio entre lo psicológico y lo dramático la obra es muy frágil, al borde del ridículo. Curiosamente la aportación más atractiva de 'El concurso de piano' llega al final. En montaje paralelo, la textura y las imágenes adquieren carácter, desgarradura. Hasta ese momento lo academicista, la frialdad frenan toda posibilidad de conmoción y vértigo. Deruddere desafina. Todos idealizamos sobre otra película que no es esta. Nos queda la música.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.