Crítica de cine 'El trompetista': Pasión y abismo

Curtiz se pone al servicio de un retrato de jazz y drama, en el que se entrelazan música y vida

Guillermo Balbona

Santander

Miércoles, 22 de febrero 2023, 17:00

Como el buen jazz no es una sola cosa. Es biopic, más de inspiración que lineal y etiquetado, pero también un drama musical que a veces parece elevarse o se muestra esquinado, siempre con la vida y los sonidos en diálogo permanente. Aunque hablamos de ... un clásico, Michael Curtiz, no es una de sus obras más conocidas y su reparto presenta un atractivo listado de intérpretes muy jóvenes que luego han sido leyenda como Kirk Douglas y Lauren Bacall. Inspirada en la biografía de Bix Beiderbecke, el oponente blanco de Louis Armstrong, 'El trompetista' toma como punto de partida una novela de Dorothy Baker.

/eldiariomontanes/www/multimedia/2023/02/22/trompetista-cartel-kRx--224x330@Diario%20Montanes.jpg

País EE UU
Año 1950
Dirección Michael Curtiz
Guion Carl Foreman.
Reparto Kirk Douglas, Lauren Bacall, Doris Day, Mary Beth Hughes, Nestor Paiva, Hoagy Carmichael, Juano Hernández, Jerome Cowan
Salas Náutica. Filmoteca de la UC. El jueves

El microcosmos entrecruzado que genera el cineasta de 'Casablanca' pasa por el músico Hoagy Carmichael, que encarna a William 'Smoke' Willoughby y la citada referencia de Beiderbecke, quien falleció a los 28 años tras irrumpir con genio en la música en una carrera truncada por el alcoholismo. Además Harry James se encargó de doblar los solos de trompeta de Douglas y los pianistas Buddy Cole y Zito pusieron su música en la banda sonora. El cineasta de 'Alma en suplicio' se muestra interesado por el pionero jazzmen de los años 20 y hay que recordar que su gusto por los musicales no era causal. Poco antes ya había firmado 'Noche y día', una incursión en la figura de Cole Porter.

Precisamente los momentos más vibrantes de 'El trompetista' afloran cuando la cámara se detiene en lo puramente musical, además de la fotografía de McCord. Entre la pasión del intérprete, visceralmente encarnado por Douglas, y esa desazón errante del músico por la ciudad. Iniciación, retrato pasional, el dilema de la música o la vida, el jazz como plenitud vivencial y existencial atraviesan la historia que Curtiz, gran contador de historias narra con solvencia y elegancia. Hay otros aspectos singulares como el espíritu libre del músico, visto por ejemplo en 'La, la land', frente a quedar encasillado en una orquesta o en una formación que estrangule el talento.

Ese pulso entre lo estándar y la música libre de los clubes recorre el poso de un filme que se mueve entre la nostalgia, la expresión del jazz y algunos personajes atractivos que quizás merecían mayor hondura. Doris Day canta 'I May Be Wrong', el jazz es reivindicado desde la primera gran secuencia de improvisación hasta el tema mantra 'Melancholy Rhapsody'. El cineasta de 'Los comancheros' ilustra el éxtasis y el abismo, la necesidad artística y el descenso a los infiernos