Otros gritos y susurros

Filmoteca. Bonifaz. Nuevo ciclo. Desde mañana. ·
Retorcida mirada donde se solapan el impacto, la tensión, el relato visual abrumador y una especie de diálogo al fondo entre el policiaco y el terror gótico

Guillermo Balbona

Santander

Martes, 2 de julio 2024, 10:22

Algo más que una mera ópera prima. También inicio de una trilogía. Y puesta de largo de las señas de estilo, rasgos y connotaciones casi ... fundacionales de Dario Argento o, lo que es lo mismo, nuevos pasos en la construcción del 'giallo' (amarillo, el color de las portadas originales de las novelas de crimen y misterio que lo inspiraron) , ese terror italiano sui géneris, entre hipérboles, suspense, destellos gráficos desatados y la utilización del gore.

/eldiariomontanes/www/multimedia/2024/07/02/el-pajaro-de-las-plumas-de-cristal-1970-l-uccello-dalle-piume-di-cristallo-blu-ray--kpOF--224x330@Diario%20Montanes.jpg

Año 1970
País Italia
Dirección y guion Dario Argento
Reparto Tony Musante, Suzy Kendall, Mario Adorf, Giuseppe Castellano
Género Terror

'El pájaro de las plumas de cristal' tiene eso y más. Una psicodelia muy personal, una inmersión en lo oscuro desde colores agresivos y viscerales, en una retorcida mirada donde se solapan el impacto, la tensión, el relato abrumador y una especie de diálogo al fondo entre el policiaco y el terror gótico. 'La muchacha que sabía demasiado' (1963) de Mario Bava está considerado el filme fundacional, el mantra visual del género, pero Argento con su debut y los filmes siguientes, objeto de revisión en el ciclo que le dedica la Filmoteca, constituyeron el canal mediático que condujo, más que a una moda, a una efervescencia por las películas con este sello. Además esta ópera prima posee singularidad como su reparto internacional con nombres como Enrico Maria Salerno, además de ser un filme bendecido estéticamente por el maestro Storaro y con una banda sonora del gran Ennio Morricone.

Con estos nombres Argento convirtió en una referencia muy personal lo que en apariencia es un thriller de terror. En 'El pájaro de las plumas de cristal' asoman asesinatos, crímenes sin resolver, policía y testigos. Nada nuevo. Pero lo diferente radica en lo visual, en la potencia de la mirada, encabezado todo por esa secuencia magistral de la galería de arte, sus cristales y vidrios, que deja ver de modo transparente el horror, pero que en realidad oculta identidades y resoluciones, engaños y espejismos. Con la sangre, siempre, como seña de identidad, cabe también el humor retorcido, el esteticismo impactante. No hay profundidad ni lo pretende, pero hoy es una icónica raíz que rezuma una especie de entusiasta locura de terror algo inocente, de sexo y sangre y, al tiempo, de exageración, divertimento e incoherencia. Lo rocambolesco, el suspense sin matices y embrutecido, y un apasionado juego que busca en todo momento exprimir los límites y márgenes de cada fotograma.