Sin cines no hay paraíso

Y ello en un contexto de contrastes marcado por la pluralidad de soportes, formatos y condiciones a la hora de determinar el ecosistema audiovisual. De hecho, la ecuación de supuesta convivencia nada amable entre pantallas tradicionales y plataformas permanece casi en suspenso dado que en las últimas semanas todo se ha reducido a un reguero de cierres temporales o definitivos de salas.

El paisaje actual es exiguo en cuanto a la cartelera. Solo Bonifaz, sede de la Filmoteca de Cantabria, y el cine Los Angeles, afortunadamente ambos en el centro, mantienen cierta regularidad y no han tenido que suspender su vínculo con el público. No obstante, las restricciones de horario también han condicionado el número de películas y las exhibiciones. A ello hay que sumar propuestas alternativas de otras entidades, caso de los ciclos del Ateneo santanderino, ya reanudados, o las actividades de Cineinfinito en el Centro Cultural Doctor Madrazo. En otros casos o bien se anunció su suspensión ya a finales del pasado año, o se han interrumpido, caso de la Filmoteca Universitaria en la sala de Náutica y los ciclos en la Biblioteca Central de Cantabria.

Otro duro golpe para el aficionado fue la suspensión en noviembre del Cine Club municipal, una exitosa y enraizada programación de ciclos de clásicos, con la recuperación paralela de textos críticos, que ha dejado otro vacío. Paradójicamente, desde el Ayuntamiento, se ha potenciado periódicamente desde el verano, la convocatoria del autocine en El Sardinero a través de ciclos ligados a periodos de vacaciones y ocio, caso de la Navidad o dentro de unos días con motivo de San Valentín.

Las dos cadenas de cines ligadas a centros comerciales, Cinesa y Unión Cine Ciudad, en El Corte Inglés-Bahía de Santander y Peñacastillo, respectivamente -es decir, veinticuatro salas-, llevan ya varias semanas cerradas. En el caso de Cinesa, su web anuncia su reapertura para el próximo día 18, aunque ya ha modificado en otras ocasiones la fecha y todo apunta a que estará condicionada por las medidas sanitarias que se establezcan tras el 15 de este mes, en función de la evolución de la pandemia. En el caso de Peñacastillo no se maneja fecha alguna de reapertura.

El lamentable cierre de las salas Groucho al inicio de este 2021 no ha hecho sino ahondar en este agujero negro que a medio plazo no parece que pueda alumbrarse. Curiosamente en este panorama desolador queda pendiente la llegada de nueve salas de exhibición vinculadas al nuevo centro comercial de Camargo.

En Bahía Real, donde van abriéndose al público desde finales del pasado año diversas tiendas y firmas, está prevista la apertura de nueve salas de cine de la empresa Ocine. La firma cuenta con salas en numerosas capitales españolas, de Madrid a Sevilla, de Mallorca a Barcelona. Las futuras salas de Camargo son parte de una serie de proyectos de implantación de esa firma en Gijón, Castellón o Valladolid.

El espectador vive entre el empacho audiovisual de las plataformas, que ya constataron su despegue con el confinamiento decretado hace casi un año, y esa ausencia de salas. Un estado de la cuestión que ya de por sí venía condicionado por el retraso o la suspensión de estrenos y la búsqueda incesante de iniciativas por parte de las grandes cadenas para atraer o retener al espectador. Reestrenos y recuperación de títulos y sagas, o propuestas que combinaban contenidos no siempre estrictamente cinematográficos con ocio, aunque en realidad ninguna de ellas ha llegado a cuajar.

La cartelera santanderina queda así limitada a las proyecciones de la sala Los Ángeles y la Filmoteca, a las que se suman en fin de semana, especialmente, salas y centros culturales de otras localidades también sujetas lógicamente a las restricciones sanitarias.

Un veterano del sector en Santander, Carlos Restegui, confesaba recientemente a El Diario Montañés estar haciendo un esfuerzo muy grande por continuar abierto. «Desde julio ha sido espantoso; fuimos de los primeros en reabrir y volvimos con la expectativa de ir viendo cómo evolucionaba la situación, pero la cosa se ha complicado, hasta el punto de que ahora mismo nuestro planteamiento es ir semana a semana».

Con uno o dos títulos semanales, su oferta mantiene el contacto con el aficionado desde el centro de la ciudad. Además su acuerdo con Netflix le permite ser una de las escasas veinte salas de todo el Estado que acoge el preestreno durante unos días de títulos pertenecientes a la plataforma.

Esta primera semana de febrero, por ejemplo, desde este miñercoles al domingo día 7, proyectará el estreno de 'Noticias del gran mundo', la cinta de Paul Greengrass protagonizada por Tom Hanks y la joven Helena Zengel. Recientemente obtuvo el premio a mejor guión adaptado otorgado por la prestigiosa Asociación de Críticos Norteamericanos, la National Board of Review, y Zengel se llevó también el premio revelación. El argumento la sitúa en Texas al final de la Guerra de Secesión. Narra la historia de un hombre, veterano de la guerra y capitán del bando perdedor, que viaja con una niña que había sido secuestrada por los indios. Un viaje que retrata Greengrass como «una crónica social de la época, a modo de elogio al imprescindible servicio del periodismo».