El Consejo de Cultura de Cantabria queda constituido a un mes de las elecciones con el encargo de un plan estratégico

Este órgano está integrado por 30 representantes de las artes y la cultura regional así como de las instituciones. Está previsto que el Consejo se reúna dos veces al año: en septiembre, para que plantee sus propuestas de cara a los presupuestos regionales, y en febrero, para poner sobre la mesa sus aportaciones para las convocatorias de subvenciones.

El consejero de Cultura, Francisco Fernández Mañanes, se ha congratulado de que «por fin» se da cumplimiento al decreto de mayo de 2018 que establecía la aprobación del Consejo Cántabro de la Cultura y ha confiado en que en la reunión de febrero del próximo año se pueda presentar un avance de plan estratégico, que deberá partir de un diagnóstico que analice fortalezas y debilidades y para el que se deberá contar, probablemente, con asesoramiento externo. A partir de ahí, el órgano deberá establecer los objetivos a medio y largo plazo «por donde debe transitar el mundo de la cultura», tanto el ámbito profesional, como la industria de la cultura, «que tiene un peso importante en la economía de la región y está llamada a tener un peso mayor», ha dicho Mañanes.

El Consejo está formado por los representantes del mundo de la cultura que fueron elegidos por las distintas mesas sectoriales en octubre y que abarcan, ha señalado, «toda la variedad de artes y manifestaciones culturales» presentes en la comunidad autónoma.

Presidido por el consejero, la vicepresidencia está a cargo de la directora general de Cultura, Eva Ranea, y cuenta también entre sus miembros con personalidades de reconocido prestigio y responsables de otras direcciones generales del Gobierno regional, la Universidad de Cantabria y la Federación de Municipios de Cantabria, representada por la alcaldesa de Santander, Gema Igual.

Para el Partido Popular, la constitución del consejo ha sido un «auténtico paripé», una «tomadura de pelo» ya que apenas falta un mes para las elecciones y con la legislatura agotada. Esto, según ha opinado el portavoz del partido y diputado regional, Íñigo Fernández, es señal de que el consejero «no cree en las posibilidades de este órgano». «Que el orden del día no iba acompañado de ninguna documentación demuestra que solo se perseguía una foto», ha apostillado en nota de prensa.

«Cualquier persona con sentido común se pregunta qué sentido tiene constituir este órgano a un mes de las elecciones, de qué va a asesorar, qué diálogo va a mantener con el Gobierno para el diseño de las políticas culturales de la región», ha denunciado Fernández, quien cree que si el Gobierno hubiera querido disponer de un órgano de participación, diálogo y asesoramiento, lo hubiera creado en los primeros meses de mandato . En este sentido, recuerda que «el decreto lleva un año metido en un cajón» y ha denunciado que el Ejecutivo no ha dado ninguna participación al Parlamento de Cantabria en el diseño de la composición, regulación y objetivos de este órgano. «Ese es su concepto del diálogo y la participación», ha sentenciado.