«La danza en Cantabria se encuentra en un claro proceso de reafirmación»

-El miércoles estrena un nuevo espectáculo 'Son de agua'. ¿En qué consiste?

-He puesto toda mi alma en él pues para mí tiene un significado muy especial. Mis dos anteriores trabajos también estaban inspirados en alguna persona o acontecimiento importante de mi vida, pero esta vez esa motivación me toca muy de cerca hasta el punto de que en muchas partes del proceso me he emocionado y más de una lágrima ha rodado por el linóleo de ensayo. He recordado a mi madre y la he tenido muy presente en todo el desarrollo de la obra. Es parte fundamental del significado de 'Son de Agua' a parte de otras tantas mujeres.

-¿Qué mujeres muestra en el espectáculo?

-Hablo de la mujer fuerte, entregada, luchadora, comprometida con la vida y con la lucha que tiene que afrontar en su día a día, También de las mujeres que disfrutan de la vida. Mi madre aglutinaba todos esos adjetivos y a ella se lo quiero dedicar. Es un espectáculo que habla de mujeres, 'mujeres azules' y he querido mostrarlas comparándolas con los estadios del agua, porque como el agua la mujer azul flota como el vapor, es dura como el hielo o fluye tranquila como en un remanso o enérgica como una ola rompiendo sobre el acantilado. El agua y la mujer llenan todos los espacios de la vida, la dan o la quitan, pero siempre su ausencia es sinónimo de yermo, de expiración.

-¿Por qué 'mujeres azules'?

-El azul vino inspirado por el maravilloso artista de Menorca Marc Jesús Vives Murtra. Tuve la suerte de conocer su obra hace dos años de la cual me enamoré y este año tuve el honor de conocerlo en persona y presentarle mi proyecto. Él, aparte de darme esa inspiración, contribuye con una pequeña muestra de su obra. Cuando veáis 'Son de Agua' comprenderéis a qué me refiero. Marc representa a la mujer teñida de azul añil disfrutando de los momentos placenteros de la vida.

-¿Cuál cree que es su aportación a la danza contemporánea?

-Quiero aportar mi visión personal de cómo transmitir, sobre todo, emociones, a través de movimientos ligados, fluidos, técnicos, siempre desde la sinceridad y haciendo énfasis en lo que llamo la danza positiva, tratando que el espectador se empape de sentimientos optimistas y disfrute con lo que está sucediendo en ese momento. También intento aportar mi pequeño granito de arena dentro de la danza de nuestra región, con una compañía local con pocos recursos, pero compuesta de un equipo técnico y artístico cántabro que se involucran para poder continuar mostrando y disfrutando de la danza en nuestra región.

-¿Cómo se encuentra la danza en Cantabria actualmente?

-La danza en Cantabria se encuentra en un proceso de reafirmación. En los últimos años un grupo de gente estamos trabajando e involucrándonos para que la región tome una posición notable en esta disciplina. Se han creado circuitos, certámenes, iniciativas como la Cultura Contraataca, Enredarte, La Espiral Contemporánea, Santander Escénica, Escena Pro y la asociación Movimiento en Red también está promoviendo muchas cosas. Afortunadamente contamos con propuestas y subvenciones del Gobierno de Cantabria y el Ayuntamiento de Santander a través de la Fundación Santander Creativa. Es muy importante para nosotros que tengamos apoyos y ayudas institucionales porque sin eso todas las artes escénicas quedarían relegadas sin la posibilidad de desarrollarse.

-Entonces, ¿corren buenos tiempos para la danza en Cantabria?

-En Cantabria, al igual que en el resto del país, no corren buenos tiempos para la danza ni para las artes escénicas en general. Los confinamientos, las restricciones de movilidad, los aforos limitados por supuesto que están influyendo en nuestro trabajo. Pero hay que intentar ser positivos y seguir luchando amoldándonos a las circunstancias que nos tocan vivir. Nosotras no hemos parado en ningún momento de luchar y creer con ilusión en la danza y en concreto en este nuevo proyecto. Hemos ensayado desde nuestras casas durante el confinamiento, viéndonos a través de una pantalla. Me gustaría lanzar un mensaje de optimismo y pensar que si hemos conseguido tantas cosas con unas condiciones tan complicadas, cuando todo mejore podremos hacer cosas maravillosas.

-En esta región hay muchas academias de danza, pero luego se programan pocos espectáculos. ¿No le parece una contradicción?

- En Cantabria hay muchas academias de danza, lo que pasa que los bailarines que se quieren dedicar profesionalmente a ello tienen que salir fuera porque no tenemos las infraestructuras y los medios para que esto se pueda hacer aquí. No obstante cada vez se está valorando más el trabajo de nuestros artistas cántabros, aunque es bastante difícil sostener una compañía actualmente. La mayoría de bailarines, directores, creadores, tienen su otro trabajo y profesión para poder tener un respaldo económico y hacer lo que les gusta porque con el de la danza no es suficiente, ya sea docencia u otro tipo de empleos y eso luego a la hora de coordinar tiempos de trabajo es muy complicado.

-¿Se sienten valorados en su tierra?

-Pienso que antes se valoraba más lo que venía de fuera, pero afortunadamente en la actualidad mucha gente está trabajando para que los artistas de la región tengamos la oportunidad de mostrar nuestros trabajos. A mí personalmente me encanta ir al teatro y me fascina poder ver compañías de todo el mundo pero agradezco muchísimo que no estén abriendo estas puertas a los artistas de Cantabria.