Borrar
Fotograma del cortometraje 'Anónimo' que se rodó en la Neocueva y se presentó ayer en el museo. :: DM
El dardo de las artistas de Altamira

El dardo de las artistas de Altamira

El museo nacional celebra el Día del Patrimonio desde una perspectiva de género

Rosa Ruiz

Santander

Domingo, 17 de noviembre 2019, 08:34

«Queríamos lanzar un dardo para que la gente reflexione, sembrar la duda, remover al espectador», explicaba ayer en el Museo de Altamira, Néstor del Castillo uno de los directores del cortometraje 'Anónimo' que se presentó en las instalaciones del también centro de investigación dependiente del Ministerio de Cultura. La posibilidad de ver filme, dirigido junto a Marisa Lafuente, y que se rodó en la Neocueva de Santillana, así como la de poder charlar con sus responsables, fue, junto con la conferencia de la catedrática de Arqueología Lourdes Prados, la forma con la que este museo quiso celebrar ayer el Día del Patromonio Mundial, una jornada en la que se puso el acento a la igualdad como valor fundamental de la educación. La jornada con tintes festivos y reivindicativo, contó además con la presencia de las tres directoras generales del Gobierno de Cantabria: la de Patrimonio, la de Igualdad y Mujer, y la de Turismo: Zoraida Hijosa, Consuelo Gutiérrez y Eva Bartolomé.

El Museo, tal y como destacó ayer su directora Pilar Fatás, ha querido celebrar esta efeméride con una iniciativa inédita, tratando cuestiones de igualdad y género, en el marco de una de las líneas de trabajo de Unesco, el papel de la cultura para la promoción del desarrollo social inclusivo y, en particular, la cuestión de género. Fatás apuntó «que educar en igualdad y visibilizar el papel de la mujer desde nuestros inicios también es un valor fundamental de nuestro patrimonio, que podemos y debemos proteger desde todos los ámbitos de la sociedad». Los museos, como agentes de transformación social, «tienen la obligación de transmitir estos valores más allá del 8 de marzo», manifestó Fatás, durante la presentación del cortometraje.

Sus directores Marisa Lafuente y Néstor del Castillo reconocieron la motivación que les empujó a iniciar el rodaje, «romper con la mirada hegemónica que impide visibilizar el papel de la mujer en todos los ámbitos de la sociedad, no sólo el doméstico y familiar, también el profesional, el cultural y el artístico». Línea que compartió, durante su conferencia Lourdes Prados, incidiendo en la importancia que en ello tiene el discurso expositivo de los museos arqueológicos: «No se trata de que las mujeres y los hombres aparezcan realizando las mismas labores, sino que se muestre que tanto unas actividades como otras, son indispensables para el desarrollo de la comunidad. No hay que idealizar el pasado a través del discurso expositivo, ni se trata de inventarnos relatos para que aparezcan mujeres, se trata de dotar de contenido aquellos ámbitos donde la investigación arqueológica nos indica que ellas desarrollaron sus actividades y que, obviamente, varían según las épocas y culturas», indicó la ponente.

«Los museos también tenemos la obligación de visibilizar el trabajo de la mujer»

Pilar Fatás | Directora del Museo de Altamira

'Anónimo', que se presentará a la edición de los Goya del próximo año, con la experiencia de la productora De Cabo a Rabo, que ya fue candidata el año pasado, está protagonizado por una mujer y, según expusieron sus directores, «nuestro objetivo es narrar ese instante en el que comienza la vida, contra la historia desde sus inicios incluyendo a todos sus agentes, en el que la mujer pudo participar en cualquiera de las actividades organizadas por el grupo sin necesidad de tener una posición de sumisión».

«Antes no se planteaba que las cuevas fueran pintadas por mujeres. Ahora existe la duda»

Lourdes Prado | Catedrática de Arqueología

Por su parte, la catedrática de Arqueología de la Universidad Autónoma de Madrid denunció durante su intervención la invisibilización de los grupos tradicionalmente olvidados para la investigación entre los que se encuentra la mujer o la infancia.

Prados reivindicó la igualdad de género como herramienta fundamental de democratización y transformación de la ciudadanía y premisa necesaria para construir una sociedad más justa. Y dentro de este marco, declaró que «los museos, como institución cultural y educativa, que custodian la memoria colectiva se convierten en uno de los instrumentos de mayor influencia social en nuestros días. Por ello, su discurso expositivo debe ser un relato inclusivo en el que todos y todas, de cualquier género, edad o identidad sexual tengan cabida».

La catedrática invitó a los asistentes a su conferencia a la reflexión como forma de romper los dogmas establecidos: «¿Por qué no plantearnos la posibilidad de que esas pinturas pudieran haber sido realizadas por mujeres? Antes hubiera sido impensable llegar ni siquiera a plantearlo, hoy ya existe la duda».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

eldiariomontanes El dardo de las artistas de Altamira