Secciones
Servicios
Destacamos
Marta Hazas (Santander, 1975) se ha convertido en uno de los rostros más populares de televisión. Ahora mismo compagina sus intervenciones en 'El hormiguero' con su participación en la serie 'Velvet', pero no olvida sus inicios como figurante en las óperas que se representaban en ... el Palacio de Festivales cuando estudiaba. Este viernes y sábado regresa a la sala Pereda con una comedia, '5 y... acción' con todas las entradas vendidas. En el escenario le acompañan su marido Javier Veiga, el autor y director de la obra, y el también popular Carlos Sobera.
-'5 y... acción' cuenta la historia de una chica muy ambiciosa dispuesta a hacer cualquier cosa por triunfar en el cine. ¿Ha conocido a mucha gente así?
-He conocido a mucha gente que tenía muy claro lo que quería en la vida y que han puesto toda la carne en el asador en la parte profesional dejando un poco al lado su vida privada. Pero algo tan extremo como lo Marisol, mi personaje en esta obra, pues no.
-¿Y cómo es Marisol?
-Creo que al final es el personaje más coherente. Es la chica del tiempo de una cadena de televisión que está ahí por ser la amante del propietario. Una persona que no es consciente de sus limitaciones, pero que poco a poco se lleva el gato al agua.
-Han vendido todas las localidades en Santander y la gira va de maravilla. ¿Qué tiene la obra?
-La obra narra un poco los sueños que todos tenemos, las frustraciones y las miserias humanas que salen a flote cuando se enfrentan las ambiciones de unos y otros y eso es por medio de cinco personajes con los que de alguna forma todos nos identificamos.
-¿Qué hay que ofrecer al público para llenar un teatro?
- No existe la fórmula mágica para llevar a la gente al teatro. Yo confío mucho en el boca a boca, que me parece la mejor publicidad. En nuestro caso, además, tenemos de cabeza de cartel a Carlos Sobera, que a la gente le gusta ver en teatro, a Javier Veiga que también tiene ya una trayectoria y yo, que poco a poco me voy haciendo un huequecito. A esto hay que sumar que la gente que viene se muere de risa y eso es lo que traslada en el boca a boca. Otra cosa que veo fundamental es ser honesto con el espectador. Si vendes una comedia, tienes que hacerle reír.
-¿La comedia es siempre una apuesta segura?
-Sí. Creo que en estos momentos necesitamos reír mucho y la prueba está en que en la cartelera de Madrid abundan las comedias o los musicales. Además las críticas te llegan mucho mejor desde la comedia que desde el drama. La gente quiere desconectar, aunque solo sea por una hora, de las miserias y los problemas cotidianos.
-Han pasado ya muchos años desde que dejó la Escuela del Palacio de Festivales para convertirse en actriz. ¿Cómo es la Marta Hazas que regresa este viernes?
-Una Marta muy ilusionada de poder volver al Palacio, porque curiosamente es de los escenarios de España que menos he pisado desde que me fui. Sólo he vuelto una vez. Así que regreso con la ilusión intacta y el ego colmado. Tengo bien presentes todos aquellos nervios que tenía cuando decidí venirme a Madrid y vuelvo contenta de lo que he conseguido y de lo que me queda.
-¿Qué recuerdos tiene de aquella etapa?
-Superbonitos. Fue una época fantástica en la que conocí a gente con mucho talento. Tanto entre los profesores como en los alumnos. Entonces yo estudiaba también Periodismo y era la primera vez que estaba rodeada de un grupo de gente con mis mismas inquietudes y por lo tanto fue un grupo muy enriquecedor para mí. Entonces todo nos hacía ilusión, como cuando venían las óperas al Palacio que nosotros salíamos de figurantes. De verdad, siempre digo que ese primer año, que equivalía a la Resad (Real Escuela Superior de Arte Dramático) y con Fernando Incera, que fue quien me tocó de profesor, supuso para mí la base del tipo de actriz que soy ahora. El paso por la Escuela del Palacio me dio una herramientas y unas técnicas que luego complementé en la Escuela de Cristina Rota.
-¿Sigue teniendo contacto con sus compañeros de entonces?
-Sí, claro, aunque me hice mucho más amiga de los que iban a segundo curso que al mío. Con ellos comparto un chat en el que están actores tan increíbles como Carlos García, con el que además he coincidido en algún trabajo, Agustín Ruiz, Patricia Cercas y alguno más.
-¿Qué consejos le daría a alguien que esté iniciando sus pasos en la interpretación?
-Que absorba todo lo que pueda. Que intente disfrutar, aprovechar las clases y, sobre todo, que se apoye en la gente que le rodea. Esta es una profesión en la que uno está solo, con sus miedos e inseguridades, por eso es bonito coincidir con un grupo de personas con las que crecer. Se crece mucho más cuando estás en un grupo talentoso que cuando, por mucho que tú destaques, estás en uno que no tiene tus mismas ambiciones.
-¿Comparte con otras actrices que actualmente no se escriben grandes papeles para las mujeres?
-Sería muy injusto que yo me quejara porque he tenido la suerte de interpretar personajes femeninos muy potentes, pero lo que sí me parece es que hay muchos menos papeles femeninos. Es decir, creo que hay grandes personajes, pero pocos.
-¿Sigue esperando un gran 'papelón' en una película de cine?
-Que va. Está claro que sí me gustaría hacer una película con un personaje que estuviera bien, fuera grande o pequeño, pero para nada lo estoy esperando. Por un lado porque no me da tiempo con el trabajo que tengo y por otro porque creo que el camino que llevan las series, y hablo a nivel mundial, se está comiendo un poco el terreno del cine. Más que el medio en sí, soy de las que prefiero un buen personaje o una buena historia.
-¿ Dios les ha venido a ver a los actores con las series?
-Para nosotros se ha ampliado el mercado de manera muy notable, sobre todo, con las plataformas digitales que hacen más internacional nuestro trabajo. En España se ha pasado de producir seis series para tres cadenas nacionales a estar haciéndose treinta que se puedan ver en toda Latinoamérica al mismo tiempo. La manera de consumir televisión ha cambiado y ahora las series se ven a la hora que quieres y donde quieres y eso es muy positivo para los actores.
-¿Cómo es trabajar con Carlos Sobera?
-Muy fácil. Carlos es muy divertido y positivo y toda la simpatía que desprende en televisión la tiene en el escenario y como compañero.
-¿Y con Javier Veiga?
-Pues como nos conocimos trabajando y este es el tercer montaje de teatro que hacemos juntos, es como trabajar en casa. Pero tengo que decir que como director saca cosas muy buenas de los actores.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.