Recuerdo de un maestro
En 1994 el trío de Ray Brown actuó en el Palacio. Mañana su discípulo, Chris McBride, celebra su música con un concierto en idéntico escenario
Enrique Bolado
Martes, 5 de noviembre 2024, 07:54
Secciones
Servicios
Destacamos
Enrique Bolado
Martes, 5 de noviembre 2024, 07:54
El 11 de octubre de 1994 el trío de Ray Brown actuó en el Palacio de Festivales. Ahora, treinta años después ,el prestigioso contrabajista Christian McBride homenajea al maestro con su grupo Remembering Ray Brown Trio, que en Santander es al tiempo una conmemoración de ... aquel concierto que los aficionados no han olvidado
La gran aportación de la música negra y en particular del jazz, su más alta expresión a la tradición musical occidental ha sido el ritmo. Es el concepto clave que en esta música se antepone a la melodía y a la armonía. La batería y el contrabajo son en consecuencia instrumentos esenciales en su impulso del grupo, con la función de dotar de ritmo y swing a la música. En esa labor Ray Brown fue el epítome del contrabajo clásico de jazz,con su sonido redondo, suntuoso, musical. Durante más de cincuenta años en diferentes formaciones, estilos y circunstancias estableció un modelo de interpretación que se convirtió en canon.
Ray Brown llego en 1945 a Nueva York desde su Pittsburgh natal. Contaba que la primera noche le pidió a un primo salir a ver la escena musical local. Era la Edad de los Gigantes, un tiempo irrepetible. Fueron a la la legendaria calle 52 y vio a Errol Garner, Coleman Hawkins,Billie Holiday, Art Tatum... La noche siguiente repitió y conoció y tocó con Dizzie Gillespie, Charlie Parker, Bud Powell y Max Roach, los jóvenes vanguardistas que revolucionaban la tradición con el bop, un estilo que iba mas allá del swing reinante y exploraba armonías mas avanzadas. En este movimiento la sección rítmica tenía un papel mayor, individualizado. El lado melódico que dominaba el swing fue sustituido por un desarrollo armónico mayor de la música y por la utilización de tempos rápidos. La nueva música era una bendición para los músicos mas creativos y audaces. Permitía el virtuosismo, lo impredecible, un individualismo que el mejor jazz siempre ha cultivado
El joven Brown se subió y protagonizó la nueva ola. Se unió a Jazz at the Philharmonic –las primeras giras musicales de grupos–, estuvo en los comienzos del Modern Jazz Quartet –la formación que desde el blues y el swing acercó el jazz a la música clásica y sus escenarios– se casó con Ella Fitzgerald y fue durante casi quince años el bajo permanente del grupo de Oscar Peterson, el más grabado y popular trío de piano. Más tarde se estableció en la Costa Oeste y en la decadencia del jazz y la invasión pop se convirtió en compositor de bandas sonoras para cine y televisión.
En los 70 fundó L.A. Four un grupo que mezclaba influencias brasileñas, cool y éxitos recientes y acompañó a Frank Sinatra, Sarah Vaughan Tony Bennet, Quincy Jones y las principales estrellas del show bussines. Convertido en el contrabajo más solicitado de la industria el revival del jazz clásico le permitió grabar abundantemente en los prestigiosos sellos Pablo, Concord y Telarc. Corolario de una distinguida y exclusiva carrera murió en 2002 en el camerino mientras esperaba su salida al escenario.
Brown fue tan demandado porque era un seguro de ritmo , ágil y melódico. Su sonido potente y diáfano marcaba el tiempo y su acertada elección melódica y armónica de las notas garantizaba la musicalidad y el swing. Su instrumento daba siempre la nota exacta, nunca la superflua. Oscar Peterson le llamo «un sonido andante»
Nadie mejor para recordar al gran jazzmen que su amigo y discípulo Christian McBride. Ya en su debut discográfico –Super Bass– en 1989 intervino Ray Brown . Desde entonces suma casi 350 grabaciones, ocho grammys y es sin duda el contrabajista más destacado del jazz contemporáneo. Lógico pues que esta gira homenaje la lidere McBride y le acompañen el pianista Bennie Green–que estuvo en el concierto de Santander de 1994– y el inmenso batería Gregory Hutchinson, dos músicos que colaboraron con frecuencia en conciertos y grabaciones con el añorado Brown. Así Remembering Ray Brown Trio es a la vez una celebración de la música del maestro y una manifestación de la vitalidad y creatividad del jazz contemporáneo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.