La 'Gente de cine' de Eduardo Pascual

Eduardo Pascual ha realizado miles de retratos a lo largo de su trayectoria profesional. Gente de toda clase y condiciones. De ellos, muchos están dedicados a gente del cine y del espectáculo. Con algunos de estos personajes famosos, además le ha unido una buena amistad. A muchos los conoció en el Festival Internacional de Cortometrajes de Torrelavega, que fundó y lideró durante muchos años Américo Gutiérrez, recientemente fallecido y al que Pascual rinde homenaje póstumo con un retrato. También nutrió su obra con los famosos que desfilaron durante años por el Teatro Principal de la calle Argumosa con sus célebres sesiones cinematográficas de los domingos. Después, recuerda el responsable de la galería Antonio Castillo, aparecieron en Torrelavega los cines más modernos. El Avenida, cerca de la estación de Feve, el antiguo cine Concha Espina, el Garcilaso o el del colegio La Paz. Uno de los hitos más importantes del mundo del cine en el Torrelavega del siglo XX fue la puesta en marcha del Cine Club Besaya, gracias al trabajo de César Rosino. Y ya en tiempos más cercanos, el Arlequín y el cine Pereda.

Torrelavega, además, ha aportado al cine una pléyade de artistas de primer nivel, desde Manuel Gutiérrez Aragón hasta Antonio Resines, Julio Núñez o Pedro Telechea. Es larga la lista de personas que se han relacionado con el cine, ya sea en el campo del cortometraje, como guionistas, técnicos, actores y actrices o directores.

Y muchos de estos personajes han sido retratados por Eduardo Pascual, un apasionado del cine. En la exposición que se inaugura en Espacio Garcilaso presenta solo la punta del iceberg. Muestra sólo una pequeña parte del gran tesoro artístico que atesora. Personajes famosos del cine y el teatro o la televisión. Desde Manuel Gutiérrez Aragón hasta Antonio Resines, Lola Herrera, Concha Velasco, Paco Rabal o Mario Zorrilla. «Una suerte de juego de espejos mágicos», añade Castillo.

Eduardo Pascual llegó hace ya muchos años a Cantabria desde su Valladolid natal. Primero a Torrelavega y después a Suances. Cuenta con una dilatada obra que hace difícil definirle como especialista en una faceta de la pintura, ya que toca todos los palos, desde el retrato a personas de toda clase social, cultural y artística, hasta el exquisito trato a los paisajes y costumbres, del mar y de la tierra. Su obra presenta un interminable muestrario de sentimientos y de colores

Junto a las personalidades del cine, en la exposición también hay retrato de personajes del mundo de la cultura y la sociedad. Pascual los considera por su categoría humana 'gente de cine'. Es el caso del mago Juan Tamariz, del que fuera director del Museo de Altamira José Antonio Lasheras o de los músicos Ara Malikian y José Luis Montón, entre otros.

Eduardo Pascual empezó a pintar con ocho años, empleando betún, pimentón, esmalte de uñas y todo tipo de maquillaje que utilizaba su madre. A los catorce años comenzó su vida laboral para poder pagarse sus estudios de arte. Cursó estudios en Valladolid durante varios años en la afamada academia del pintor José David Redondo. En 1985 dejó Valladolid y se instaló en Palencia, donde trabajó con los pintores Vicente Mateo y López Nozal. Años después fijó su residencia en Cantabria, donde creó su propia academia de pintura en Torrelavega.

A lo largo de su amplia trayectoria profesional ha recibido numerosos premios y distinciones, y sus obras están presentes en diversas colecciones de instituciones públicas y privadas. Además, ha realizado multitud de exposiciones tanto a nivel regional, como nacional e internacional.

La exposición de Eduardo Pascual sustituye en Espacio Garcilaso a la de la artista Carmen Ríos Revuelta (Boo de Piélagos, 1957) titulada 'Gentes de África', un conjunto de cuarenta acuarelas donde relata su viaje por Senegal, una mezcla colores, paisajes, ciudades y gentes.