Las huellas que Carmen Sevilla dejó en Cantabria

Ante la mirada de numerosos admiradores y curiosos, Carmen Sevilla recorrió El Sardinero en un coche «acorde a ella». Como recuerda Mercedes Mazo, «Setién, de Setién, Herrá y Cía., le cedió su propio vehículo para la ocasión», y justo se le ve al empresario junto a su mujer en la parte izquierda de la imagen cuando pasó por Piquío.

Durante aquella estancia en la capital cántabra visitó varios establecimientos comerciales y entregó los premios en una competición de bolos en la bolera de la Peña La Carmencita. Además asistió junto a Fernando Fernán Gómez a una función de cine en el Teatro Pereda, en la que se proyectó la película 'Congreso en Sevilla', que ambos protagonizaban y tras la cual firmaron autógrafos a sus fans. Como recuerda el periodista Javier Rodríguez, «entre otros agasajos fueron invitados a una deliciosa cena en el bar-restaurante Miralpuerto por Cayetano Seoane, su dueño».

Tuvieron que pasar 43 años para que Carmen Sevilla volviera de forma oficial a la región, y fue con motivo de la grabación del programa 'Cosas que importan' para Televisión Española en la plaza de Potes. La artista presentó aquel episodio en el que también participaron Jaume Barberá, Los Morancos, Celia Cruz, el grupo argentino La Mosca y la recientemente fallecida Mari Carmen, que viajó a Liébana con Doña Rogelia. En una entrevista posterior recordó que en aquella ocasión «también estaba en Potes el que es hoy director del programa que presento, 'Cine de Barrio', Francisco ¿Parece cosa del destino verdad?». De aquellos días hay también una imagen de Carmen Sevilla junto a varias vecinas de Pendes.

En el año 2007 la artista, con más de 80 películas en su currículum, fue nombrada Orujera Mayor de la Fiesta del Orujo de Potes y en aquella ocasión confesó que a Cantabria le unían fuertes lazos de amistad. Durante su matrimonio con Vicente Patuel visitó Liébana en numerosas ocasiones y «me llevaron a una ermita que está en una peña, en un lugar muy alto», decía refiriéndose a la de la Virgen de la Luz. «Allí se celebró una misa en su memoria y aquello lo llevaré siempre en el corazón».

«Conozco muy bien a las gentes de Liébana y adoro a ese gran pueblo, me siento muy a gusto entre ellos», decía antes de recibir la distinción de Orujera. También tuvo palabras de cariño hacia el que fuera alcalde de Potes, Alfonso Gutiérrez, que falleció poco antes de que ella viniera por última vez a la región. «Le tenía un gran cariño, siempre me hizo sentir como en casa. Era un hombre caballeroso y gran anfitrión», recordaba para afirmar que siempre que venía a Cantabria se sentía «muy feliz».

Y así lo demostró en aquella última visita en la que recibió el título de Orujera junto al coreógrafo de Torrelavega, Poty Castillo. Como recoge la crónica de José Ignacio Arminio: «La liaron, vaya que si la liaron. Bien acompañados por Los Del Río, cantaron la famosa 'Marcarena' y bailan por sevillanas. Todo un derroche de simpatía y buen humor». Y es que Carmen Sevilla iluminaba cualquier sitio al que llegaba. Y el orujo le gustaba: «Con esos vasitos chiquititos, no veas la de ellos que van y vienen y eso que yo no soy de beber pero está riquísimo. La crema y el orujo, son únicos en el mundo», decía animada en aquella visita 'oficial' en la que también subió hasta el Monasterio de Santo Toribio y se fotografió con sus amigos y todos los seguidores que al verla se acercaban con cariño a saludarla.

La eterna sonrisa de Carmen Sevilla, su encanto natural y sencillez se apagó este martes a los 92 años a consecuencia de una larga enfermedad.