Juan Muñoz y la primera muestra en España de Ellen Gallagher en el Centro Botín en 2022

La exposición individual de la artista estadounidense Ellen Gallagher (1965) ya fue planificada para 2020 pero la pandemia obligó a su aplazamiento. Desde mediados de los noventa, está considerada una de las artistas estadounidenses con mayor proyección en la actualidad. La obra de Ellen Gallagher forma parte de las colecciones del MoMA, el Metropolitan Museum o el Centre Pompidou y en esta pasada década presentaba su primera individual en el Reino Unido de la mano de la Tate Modern. Su producción, de la que muchos críticos destacan su «imaginación y virtuosismo, toma referencias de la mitología, la naturaleza, el arte y la historia social» y se viene desarrollando desde hace veinte años en medios diversos: desde la pintura a la animación pasando por el dibujo, los relieves, los collages, los grabados, la escultura o el cine. Gallagher y Cleijne colaboran juntos desde 2004 en la producción de algunos trabajos, mientras continúan produciendo obras individualmente.

En el caso de Damián Ortega (1967) su creación está centrada en situaciones específicas y objetos cotidianos que altera y transforma para problematizar nociones más amplias, caso de «los discursos económicos, sociales y políticos que articulan la materia y las relaciones en las que esta se ve inserta».

La obra escultórica de Juan Muñoz posee una huella viva e intensa en el arte español contemporáneo. Pero más desconocida y, sin embargo, de especial interés es su faceta como dibujante, que el artista concebía como independiente de sus esculturas.

En la próxima temporada expositiva del Centro Botín, Vicente Todolí, presidente de la Comisión asesora de artes plásticas de la Fundación, será el comisario de la exposición de Ortega. La muestra de Juan Muñoz, que será comisariada por Dieter Schwarz, autor y especialista en arte moderno y contemporáneo, presentará por primera vez «una visión general de esa producción dibujada del artista».

Además, en febrero la Fundación Botín abrirá una nueva convocatoria de sus Becas de Artes Plásticas y de las Becas de Gestión de Museos y Comisariado de Exposiciones, manteniendo así su apoyo a la creación más contemporánea. El programa expositivo se completa con la actual muestra 'Thomas Demand: Mundo de papel', cuya clausura está prevista para el 6 de marzo; 'Miradas al arte. Pintura', 'Retratos: Esencia y expresión', e 'Itinerarios', tanto la recién inaugurada XXVI edición como la siguiente, cuya apertura está prevista para el 18 de noviembre de 2022.

Bárbara Rodríguez Muñoz, directora de exposiciones y de la colección del Centro Botín, subraya que el próximo año «continuaremos ofreciendo a los habitantes de Santander y Cantabria, así como a los visitantes nacionales e internacionales, un programa expositivo diverso e innovador que conecte a las audiencias tanto con los debates artísticos más contemporáneos, a través de intervenciones únicas en los espacios expositivos diseñados por Renzo Piano, como con los grandes maestros desde una perspectiva novedosa».

La primera exposición en nuestro país de Ellen Gallagher (Providence, Rhode Island) abarcará dos décadas de producción y contará con tres instalaciones fílmicas creadas en colaboración con el artista neerlandés Edgar Cleijne (Eindhoven, Países Bajos, 1963).

En un recorrido inmersivo que examina y pondera las tensiones que se dan entre la ficción y la realidad, la exposición explorará problemáticas relativas a raza, identidad y transformación en relación con temáticas históricas y contemporáneas, como la abstracción modernista, la biología marina y la cultura popular negra. Esta exposición incluirá una selección de las brillantes 'Black Paintings / Pinturas negras' de Gallagher, una secuencia de obras monocromas iniciada en 1998, cuya superficie queloide de capas y cicatrices remite a la brutal realidad de la extracción colonial y a las profundas raíces que el elemento psicótico presente en las relaciones étnicas y raciales tiene en la historia de la abstracción occidental. También estará presente 'Watery Ecstatic / Extático acuoso', una serie de obras sobre papel iniciada en 2001 y todavía en progreso, en la que Gallagher plantea una nueva historia natural de complejas formas biomórficas asociadas con Drexciya, un legendario reino subacuático para las vidas del más allá de las victimas del comercio transatlántico de esclavos.

Tres instalaciones fílmicas, producidas por Gallagher y Cleijne, completan la exposición. Entre ellas destaca su colaboración más reciente, 'Highway Gothic', una meditación inmersiva sobre las implicaciones ecológicas y culturales de la Interstate 10, la autopista que atraviesa el delta del Mississippi y bordea Nueva Orleans. La pieza se compone de proyecciones en 16mm y cianotipos impresos en tela y sobre película de 70mm.

Fuera del espacio expositivo, bajo el edificio y, por tanto, en diálogo directo con el mar, se instalará 'Osedax', una narrativa cinematográfica centrada en la llamada «caída de ballenas», un término científico que describe el descenso de los cadáveres de ballenas a zonas abisales, donde son consumidos por carroñeros. De ahí el título de la obra, 'Osedax', que designa un género de anélidos necrófagos.La exposición irá acompañada de una publicación que incluirá un texto del célebre escritor inglés Philip Hoare, conocido por su trilogía 'Leviatán o la ballena' (2008), 'El mar interior' (2013) y 'El alma del mar' (2017), y por 'Alberto y la ballena' (2021).

A través del ingenio y el humor, Damián Ortega (Ciudad de México, 1967) deconstruye objetos y procesos conocidos al alterar sus funciones y transformarlos en experiencias novedosas y situaciones hipotéticas. Su obra aplica los conceptos de la física a las interacciones humanas en donde el caos, los accidentes y la inestabilidad producen un sistema de relaciones en flujo constante. El artista explora la tensión que habita cada objeto: «Lo enfoca, reorganiza, escudriña e invierte su lógica para revelarnos un infinito mundo interior». El resultado de esta investigación exhibe la interdependencia de diversos componentes, ya sea dentro de un sistema social o en los engranajes de una máquina compleja.

Aunque sus proyectos -concebidos a partir de dibujos- se materializan en esculturas, instalaciones, performances, vídeos y fotografías, para Ortega la obra de arte es siempre una acción: un evento. Sus experimentos existen en un espacio donde lo posible y lo cotidiano convergen para activar una nueva y trascendente forma de mirar a los objetos ordinarios y las interacciones rutinarias, «algo que sin duda se podrá comprobar próximamente en el Centro Botín».

En el contexto del arte europeo de las décadas de 1980 y 1990, Juan Muñoz produjo un corpus de trabajo excepcional durante su breve carrera como dibujante. Aunque su labor en este campo fue extensa, el dibujo no era una actividad a la que se dedicara de forma constante, sino que lo empleaba como medio para determinados propósitos y momentos de su trabajo. De ahí que su estilo cambiara de un modo bastante radical, pasando de sencillos bocetos a láminas meticulosamente ejecutadas, de dibujos a mano alzada a trabajos realizados tras proyectar imágenes sobre papel. Sus dibujos podían formar parte de obras escultóricas o ser concebidos como ilustraciones literarias, pero también adoptar la forma de creaciones autónomas con las que concebía imágenes sumamente metafóricas.

En esta exposición, el Centro Botín reunirá más de doscientas obras de Juan Muñoz (1953-2001), presentando por primera vez una visión general de su producción dibujada gracias a préstamos de instituciones y colecciones de Europa y Estados Unidos y, muy especialmente, del Estate de Muñoz. El montaje, que tendrá en cuenta los diversos aspectos de su obra y los cambios experimentados por ella a lo largo de aproximadamente dos décadas de actividad, creará una narrativa que respetará y realzará estas consideraciones. De este modo, presentará «una secuencia de secciones, organizadas de forma más o menos cronológica, abordando cada una de ellas una temática distinta». Entre las obras que se expondrán figura la serie 'Raincoat Drawings' (Dibujos-gabardina), unos bocetos muy particulares que muestran salas de estar y otros espacios interiores, y 'Back Drawings' (Dibujos de espalda), en los que el artista reprodujo el torso desnudo de figuras masculinas vistas desde atrás, siendo ambas series de una etapa muy incipiente de su carrera.

Y completa la oferta expositiva la cita anual que muestra los trabajos de los artistas que reciben una de las Becas de Artes Plásticas de la Fundación Botín, «un programa de ayudas que se inicia en 1993 con el objetivo de apoyar a estos artistas a crear y a dar a conocer sus más ambiciosos proyectos, aquellos en los que se fusionan la investigación y la producción, al mismo tiempo que se les da la oportunidad de completar y profundizar en su formación».

De este modo desde noviembre de 2022 al primer semestre de 2023, Itinerarios XXVII reunirá los proyectos de: Armando Andrade Tudela (Lima, Perú, 1975), Gruber Assaf (Jerusalén, Israel, 1980), Lucía Bayón (Madrid, 1994), Alfonso Borragán (Santander, 1983), Gonzalo Elvira (Neuquén, Patagonia Argentina, 1971), Seila Fernández Arconada (Santander, 1986), Joan Morey (Islas Baleares, 1972) y Ana Santos (Espinho, Portugal, 1982).