Secciones
Servicios
Destacamos
ÁLVARO G. POLAVIEJA
santander.
Miércoles, 3 de noviembre 2021, 07:18
Entiende la escritura como un ejercicio de libertad y, por tanto, de responsabilidad. Lo ejerce con pasión vocacional y habla de mujeres que buscan conquistar su independencia en una sociedad cargada de eslóganes pero a la que habitualmente contradice la terca realidad. Gracias a ello, ... la escritora española Najat El Hachmi (Nador, Marruecos, 1979) ha sido galardonada este año con el premio Nadal por su novela 'El lunes nos querrá'. En este reconocimiento han jugado un papel esencial autoras como Carmen Laforet, quien centró ayer el encuentro en el que participó El Hachmi en la Filmoteca, en el que estuvo acompañada por la hija de la narradora catalana, Marta Cerezales, y por la periodista Raquel Conde, encargada de moderar el coloquio. La autora analiza el creciente peso de las mujeres en el sector editorial, tanto desde el punto de vista de las escritoras como de las lectoras, y resalta la importancia de la literatura como antídoto contra la deshumanización. Con su última novela publicada por la editorial Planeta, El Hachmi cuenta con otros seis títulos en su bibliografía -'Yo también soy catalana', 'El último patriarca', 'La cazadora de cuerpos', 'La hija extranjera', 'Madre de leche y miel' y 'Siempre han hablado por nosotras'.
-Una vez más, el Nadal premiando y dando visibilidad al talento femenino. ¿Qué ha representado para usted este galardón?
-El premio Nadal representa una cosa muy importante para cualquier escritor, que es la posibilidad de llegar a otros muchos lectores. Ha sido un año muy bonito, de mucho retorno por parte de mis lectores. El Nadal es un premio muy especial, con una carga simbólica muy importante a nivel histórico por lo que representan para los lectores muchos de sus ganadores, que hoy forman parte de nuestra formación literaria.
-Ganó el premio con su novela 'El lunes nos querrá'. ¿Qué historia planteó en ella y por qué?
-El libro cuenta la historia de dos jóvenes que están adentrándose en la vida adulta, lo que hace que sea algo bastante universal porque es un momento muy interesante en la vida de cualquier ser humano. También es una historia de lucha por una libertad muy particular, porque se tiende a pensar en la libertad como un concepto abstracto, muy elevado y metafísico, pero creo que su conquista en realidad se da en las pequeñas cosas, en el día a día. Nadie es libre en abstracto, sino en las posibilidades que tiene de decidir sobre su propia vida.
-¿Por qué es importante dar visibilidad a esa realidad, como ha hecho también el Nadal desde Carmen Laforet hasta usted?
-No se trata tanto de dar visibilidad a las mujeres por el mero hecho de serlo. La Humanidad se compone de los dos sexos y hasta hace poco sólo uno de los grupos tenía el poder de escribir, de imaginar y de representar a la Humanidad entera. Lo justo es que esa representación sea más equilibrada, aunque solo sea por el simple hecho de que el punto de vista y las historias que podemos contar las mujeres también es muy diverso, y en todos los casos tan válidos como los de los hombres.
-Es incuestionable que en las últimas décadas las escritoras han enriquecido enormemente el panorama literario...
-Sí, y además hay que tener en cuenta que la mayoría de las lectoras son mujeres, y como tal se interesan por unos temas, por un tipo de escritura u otros... En realidad es una suerte porque, en general, como lectoras no tienen prejuicios sobre el género del autor y no descartan a los hombres por el simple hecho de serlo.
-Como creadora habrá visto evolucionar esa situación. ¿Cuál es su perspectiva?
-La situación está ya ganada porque estamos viviendo una revolución lectora y las lectoras están decidiendo qué se lee y qué no. En ese sentido el panorama literario ha cambiado mucho.
-Ha llegado a Santander para hablar de Carmen Laforet. ¿Quién es para usted la escritora catalana? ¿Qué aporta tanto su obra como su figura?
-Como escritora creo que es un referente en cuanto al ejercicio de libertad creativa. Cuando estamos empezado a escribir es muy importante poder contar con ejemplos así, porque cuando la leemos a ella nos damos cuenta de que es posible escribir sobre lo que una decida escribir. Laforet nos muestra cómo se escribe en libertad a pesar de que sus circunstancias no eran las mejores para poder hacerlo. Su ejemplo ha sido muy importante para mí, porque las autoras que son capaces de sobreponerse a las limitaciones que les marca su tiempo y expresarse con total libertad abren muchas puertas, aunque no fuese esa su pretensión (ríe). Carmen Laforet demostró que es posible escribir sobre cualquier cosa, aunque nadie lo hubiese hecho antes.
-¿Qué puede aportar la literatura en una sociedad tan polarizada y dominada por la apariencia y el entretenimiento?
-Sobre todo humanidad. Muchos de los conflictos y de las tensiones que estamos viviendo a día de hoy tienen que ver con un proceso de deshumanización. Es algo que ocurre a muchos niveles, desde esa persona a la que hemos puesto la etiqueta de turno, porque eso también forma parte del proceso. Para mí la literatura ha sido un camino de descubrimiento de lo que hay humano en personas muy distintas y en personajes que pueden estar en realidad que nada tienen que ver con la mía. Al final vamos siempre buscando lo distinto en aquello que leemos, y lo que de algún modo nos hace sentir bien es reconocernos en ese otro.
-Algo así como un campo de entrenamiento en el que aprendemos a ir más allá de nosotros mismo, entiendo.
-Sí, y por eso la literatura es imprescindible para poder pensarnos de una forma más humana, menos fanática y excluyente.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.