La pianista santanderina Cristina Alonso denuncia las oposiciones en la Escuela de Canto de Madrid

La pianista considera lamentable lo ocurrido en las oposiciones y afirma sentirse humillada. «No sé qué está pasando pero los criterios con los que me han puntuado no son musicales», declara. El periódico El País publicó ayer la denuncia de esta pianista que ha quedado fuera de las pruebas para cubrir tres plazas de profesores. De los 17 candidatos que comenzaron los exámenes sólo siguen doce. Alonso Presmanes, con una puntuación de 2.7, es la última de la lista por lo que su puesto de interina peligra. Y ante esta situación ha decidido tirar del hilo porque según dice, «es lamentable que el tribunal que ha juzgado mi trabajo esté formado por compañeros entre los que hay amistades y envidias».

Ante el temor de que ocurriera lo que al final ha pasado, la pianista avisó a profesores y alumnos para que fueran a escucharla a la audición porque «las pruebas no se graban para evitar reclamaciones, y aunque sé que una grabación no vale como prueba en un juicio porque no se puede grabar, le dije a un amigo que lo hiciera». Y cuando ha visto la grabación señala que «toqué segura y dominando el repertorio. Se les tendría que caer la cara de vergüenza por ponerme un 1.6 de nota».

Tras conocer la puntuación, la santanderina ha presentado una denuncia por prevaricación ante el tribunal. «Es una vergüenza, lo han hecho tan mal que no es que me hayan puesto una nota que me impide acceder a la cátedra, sino que estoy al límite de seguir como profesora interina».

Alonso Presmanes lleva 16 años trabajando en la Escuela de Canto de Madrid con una nota de 10 por méritos artísticos «y ahora son mis propios compañeros los que quieren echarme del trabajo». Enfadada por la situación, reconoce que «es una profesión donde hay muchas envidias y dentro del claustro de profesores yo soy una persona guerrera y no comulgo con los cuatro profesores estrella. Si algo no me gusta, discuto».

Otra cosa que le ha molestado a la pianista es que «el otro día me dijeron que si iba a la prensa no harían nada por contratarme. Fue en ese momento cuando dije, se acabó, hasta aquí hemos llegado. Todos me conocéis como artista y sabéis de mi trayectoria profesional». Es más, añade, el repertorio junto a los dos cantantes de ópera que interpretó durante la prueba acaba de tocarlo en un festival internacional de música. «Y el teatro se puso en pie», afirma. «Llevo 16 años siendo la segunda interina de Madrid con un 10 en méritos artísticos, una nota que supera a la de muchos funcionarios de carrera con treinta años de servicio», explica.

Esta práctica en los exámenes «no se ha denunciado nunca porque tenemos miedo. En estos momento no sé si este año trabajaré...». Añade que el director del conservatorio se ha puesto en contacto con ella sólo para decirle que no hará declaraciones a la prensa. «Es lamentable», insiste la pianista que seguirá hasta el final con la idea de que se repita la prueba.

Cristina Alonso Presmanes ha compaginado la docencia en el conservatorio de canto con conciertos alrededor del mundo. Ha tocado en Nueva York, Moscú o Sidney. Ha acompañado a grandes voces como Roberto Scandiuzzi o Francesca Patané y ha tocado en los grandes teatros españoles.

En Santander ha participado en cursos de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo y en conciertos y recitales del Palacio de Festivales. Al finalizar los estudios en el Conservatorio Superior de Bilbao, ha completado su formación con Manuel Carra, Joaquín Achucarro o Marta Gulyas, entre otros.