Monty Alexander abre la semana del jazz más internacional en Santander

Ha asomado a borbotones y de manera desigual durante décadas con hitos fugaces, amagos prometedores y falsas expectativas. Ahora, paradójicamente en un contexto de pandemia, al amparo de la Fundación Santander Creativa, ha surgido un proyecto impulsado el pasado año por Enrique Bolado desde la dirección general de Cultura, que busca asentarse. La respuesta a esta edición parece confirmar el buen camino.

Monty Alexander comenzó a tocar con tan solo cuatro años y a ofrecer conciertos desde los catorce. Aunque su estilo se ha comparado con el de reconocidos músicos como NatCole y Oscar Peterson, posee una personalidad propia que sabe conjugar a la perfección con las influencias que ha recibido a lo largo de su carrera y con los ritmos tradicionales de su país. Una energía plasmada en setenta CD, «basada en las verdades eternas: melodías interminables, surcos efervescentes, voces sofisticadas, un espíritu romántico y una predisposición constante», como dice Alexander, «para aumentar el calor y provocar una tormenta». En el curso de cualquier actuación, Alexander aplica esa estética al repertorio que abarca una amplia gama de expresiones musicales de jazz y de Jamaica: «el cancionero americano y el blues, el gospel y el bebop, el calypso y el reggae». Su talento también alcanzó el éxito en la industria cinematográfica colaborando con Clint Eastwood en la banda sonora de la película 'Bird' (1988), la cinta que este director dedicó a la vida del saxofonista Charlie Parker.

Monty Alexander -calificado como el quinto mejor pianista de jazz detodos los tiempos en The Fifty Greatest Jazz Piano Playersof All Time (Hal Leonard Publishing)- protagoniza el regreso del jazz a Santander. Un festival que se adapta a las circunstancias provocadas por la pandemia, con aforo limitado, distancia de seguridad y las medidas de higiene pertinentes, del 3 al 7 de agosto en la carpa del Circo Quimera ubicada en el Parque Mesones del Sardinero.

El jazz continuará el miércoles con el concierto que protagonizará Alain Jean-Marie Quintet patrocinado por la Concejalía de Cultura. Pianista elegante de gran imaginación, premiado internacionalmente y con un currículo extraordinario en el que figuran algunos de los nombres más destacados de la historia del jazz como Chet Baker, Lee Konitz y Max Roach.

A lo largo de su dilatada carrera ha participado en medio centenar de sesiones de grabación, entre las que se encuentra la de su disco 'Afterblue', con el que obtuvo el premio Boris Vian y el premio 'Django Reinhardt al mejor músico de jazz de Francia. En este nuevo quinteto ha incluido a músicos jóvenes y de gran proyección como el trompetista francés Fabien Mary y el saxofonista norteamericano de origen ruso Dmitry Baevsky. También estará acompañado por el contrabajista Fabien Marcoz y el baterista Bernd Reiter.

El festival incluye, por primera vez, una interesante selección de músicos de la escena jazz local que actuarán el jueves. Se trata del flautista y saxofonista Juan Saiz, que interpretará un repertorio de gran calidad junto a Carlos Gutiérrez al bajo eléctrico y Chus Gancedo a la batería.

Los tres forman Juan Saiz Trío, una propuesta fresca e innovadora caracterizada por el riesgo, el inconformismo y la búsqueda permanente.

Lo mejor del jazz cántabro continuará con Toño Gutiérrez Sexteto. Toño es clarinetista y bajista, profesor en el Conservatorio Ataúlfo Argenta, director de su Big band y acaba de publicar su primer disco en solitario. Actuará junto a Chicos Villanueva al saxo y la flauta, Benjamín Blanes a la trompeta y el fiscorno, Rafael Santana al piano, Javier G. Escudero a la guitarra y Chus Gancedo a la batería.

Al día siguiente, el viernes, aparecerá en el escenario The Guitar Conference, un proyecto creado en 2009 para reunir a algunos de los mejores guitarristas de jazz con la idea de que intercambien ideas de forma espontánea y relajada. En Santander la formación contará con los guitarristas Peter Bernstein, Philip Catherine, Martin Taylor y Jesse Van Ruller. También estarán Phil Wilkinson con el órgano Hammond y Mourad Benhammou a la batería.

El festival cerrará su programación el sábado 7 con el concierto de la pianista y vocalista Champian Fulton, de Oklahoma, y el saxofonista Harry Allen, de Maryland. El swing y la carismática puesta en escena de Champian la han convertido en fiel defensora de la tradición del jazz desde Estados Unidos a Europa. El padre del saxofonista Harry Allen trabajó como baterista profesional en su juventud y fue quien lo animó a empezar su carrera musical. Allen se puede encajar en el movimiento conocido cómo «neoclásico» dentro del jazz más ortodoxo. Ha desarrollado un estilo propio que une a la robustez del sonido con la sensibilidad en la interpretación. Junto a Champian y Allen tocarán el contrabajista Georgios Antoniou y el baterista Jean-Pierre Derouard.