La Muestra de Teatro abraza a Atalaya a través de su 'Esperando a Godot' de Beckett

Además, se proyectará la película 'El abrazo del tiempo', que documenta los 40 años de trayectoria profesional de la compañía sevillana, habitual en las programaciones teatrales de la UC desde hace 38 años y que justamente clausuró la primera edición de la Muestra. El actor Jerónimo Arenal, uno de los puntales de la compañía Atalaya, a la que pertenece desde hace 25 años, empezó su carrera profesional en La Machina Teatro en donde intervino en sus primeros espectáculos: 'El aprendiz' y 'La sangre de Macbeth', entre otros. Esta agenda escénica se abre el jueves, a las 19.30 horas, en la Sala Pereda con la proyección del documental y una conversación entre Ricardo Iniesta, director de Atalaya, el propio Jerónimo Arenal, y Francisco Valcarce, director del Aula Teatro UC. El viernes el Paraninfo alberga la representación de 'Esperando a Godot'.

Atalaya, vieja conocida de la Muestra cántabra, bajo la dirección de Iniesta se ha convertido en una de las compañías españolas más prestigiosas y referente del teatro de investigación. Así lo han subrayado los críticos más relevantes y de ese modo fue subrayado por el jurado que le concedió el Premio Nacional de Teatro 2008 «por la creación de un espacio original de exhibición, producción, formación y reflexión teatral, resultado de una larga trayectoria profesional». A lo largo de sus 40 años de trayectoria ha recorrido más de 600 teatros de 50 países del mundo en los seis continentes y la totalidad de las provincias españolas. Ha participado en casi 200 festivales internacionales y obtenido 60 premios. Por primera vez, la compañía transita en el teatro del absurdo, abordando la obra cumbre de ese género, el texto más emblemático de Beckett, una referencia de la vanguardia del siglo XX. En 'Esperando a Godot', un par de amigos se encuentran para conversar, bromear, discutir, amarse, rechazarse, reconciliarse... entre ellos, mientras esperan un día y otro al misterioso Godot. Una combinación de humor, poesía, ternura y tensión de esta «tragicomedia en dos actos». La crítica Rosalía Gómez ha destacado el extraordinario trabajo del cántabro Arenal y de Manuel Asensio; una interpretación que se desarrolla en un escenario presidido por el mítico árbol en el que pretenden suicidarse. Los actores van poblando los complejos diálogos beckettianos de pequeñas y continuas acciones y matices. A su larga experiencia actoral, se unen en ellos influencias como las de Oliver Hardy y Stan Laurel, Kantor o el mismísimo Valle Inclán.