La barba (y el músico) del año

Jack Garratt es una elección más complicada de explicar que esos ilustres antecedentes, porque no se le puede enmarcar de manera automática en la celdilla acotada de un estilo: lo suyo es pop electrónico contemporáneo, propenso a los ambientes envolventes y a las melodías de herencia soul, que conecta con los parámetros estéticos de los oyentes jóvenes (su método compositivo, en plan artesano de dormitorio, hace crecer las canciones a partir de los ritmos) pero contiene abundantes ecos que podríamos llamar clásicos, incluidos algunos solos en los que su guitarra se encabrita y se desmanda. «Es como si hubiese alimentado una moderna supercomputadora pop con la influencia de ídolos como Stevie Wonder, Tom Waits y Stevie Ray Vaughan», describe la BBC. Quizá el rastro más identificable sea el del primero, que también fue la primera referencia musical de su vida: Garratt, hijo de una profesora de música, recuerda cómo en su casa sonaban repetidamente los elepés de Stevie Wonder, en particular una copia muy baqueteada de 'Songs In The Key Of Life'.

Jack Garratt: 'Worry', en directo

La profesión materna le marcó, ya que creció acostumbrado a que el hogar familiar estuviese repleto de instrumentos (ha tocado, por ejemplo, el trombón) y desde muy pequeño asistió a clases de música y se acostumbró a actuar. Con 13 años, se presentó como aspirante a representar al Reino Unido en Eurovisión Junior, pero quedó el último de los finalistas. Era la época en la que escribía «canciones terribles acerca de chicas», tal como ha explicado a la revista 'Interview'. Con 18, aún sin esa barba pelirroja que hoy le sirve de seña de identidad, era un solvente 'bluesman' con chaleco, camisa de cuadros y sombrero que parecía muy alejado de la modernidad y sus máquinas. Pero, cuando estaba a punto de cumplir los 20, una profunda crisis existencial le llevó a cuestionarse su relación con la música, y de aquel periodo de desánimo y dudas emergió triunfante el Garratt actual, hirsuto y tecnificado.

Los Teleñecos

En concierto, nuestro protagonista se convierte en un atareado hombre orquesta, un 'juan palomo' autosuficiente que va construyendo sus canciones a base de teclados, guitarra y una baqueta con la que golpea 'pads' electrónicos. Es una multitarea exigente en la que siempre acecha el error, y Garratt logra sacarla adelante gracias a la «memoria muscular», un entrenamiento que le permite no prestar atención a las partes más mecanizadas: «El momento en el que pienso en ello es el momento en el que todo empieza a ir mal», ha comentado en 'Beat' el bienhumorado Jack, que el mes que viene editará por fin su álbum de debut, titulado 'Phase'.

En su avance acelerado hacia la fama, Jack Garratt se sigue sorprendiendo de que le pregunten por detalles tan nimios como su pasión por los Teleñecos. «Me encuentro en un lugar privilegiado en el que la gente, por alguna razón, está interesada en lo que pienso. Me resulta difícil de creer, porque ni siquiera yo estoy interesado en lo que tengo que decir», se ríe. Además, ha hecho excelentes amistades en distintos niveles de la aristocracia del rock. Ha acompañado como telonero a Mumford & Sons, recibe consejos del mismísimo Rick Rubin (el legendario productor, otro campeón de la barba, escucha sus temas nuevos y le asesora) y, cómo no, ha llegado a conocer a su mito infantil, Stevie Wonder, aunque aquel encuentro en un festival británico le ha dejado un recuerdo agridulce. Stevie le dijo que le habían hablado muy bien de él como multiinstrumentista y añadió: «Deberías salir con la guitarra al final de mi actuación y tocar 'Superstition' con nosotros». El nerviosísimo Garratt lo dejó pasar, convencido de que Stevie estaba bromeando, pero a día de hoy continúa dándole vueltas a aquel diálogo un poco absurdo. «Si lo estaba diciendo en serio, es que soy un idiota».

La lista del 'Sound Of 2016' de la BBC

1. Jack Garratt

2. Alessia Cara

3. Nao

4. Blossoms

5. WSTRN / Mura Masa