Tomasito presenta en Santander 'Ciudadano gitano'

A mediados de enero, con más de 30 años de carrera a sus espaldas, empecé muy temprano, matiza, sacó nuevo disco. 'Ciudadano gitano' es una selección de temas de todos sus anteriores trabajos, algunos ya descatalogados y canciones que ni siquiera estaban en internet, por lo que muchos de sus seguidores las descubrirán ahora.

Este viernes, Tomasito regresa a Santander (Sala Cantabria, 21.30 horas) para hacer de las suyas. Esto es; repartir alegría. Ese es su objetivo cuando se sube al escenario y va enredando los géneros. Igual le sirve el funky que el hip hop o los ritmos africanos. Todo casa con su flamenco fusión. Y con el baile mi plato fuerte, dice.

Así comenzó todo. Con 14 años se lo llevaron a Madrid. Estaba flipando, recuerda. Allí acompañaría a figuras como Chano Domínguez o Lola Flores, con quien estableció una relación familiar. Y desde entonces, no ha parado.

Ha conseguido crear su propio e inclasificable estilo que se entiende allá donde va. Lo importante es que te llegue, añade, y no pone diferencias a un público u otro porque, además, en el norte también son muy flamencos. Tomasito le canta a la vida desde la alegría. Desde la sencillez. Porque Cada día que pasa hay que celebrarlo. También las canciones, que para eso están, insiste.

En su recorrido, en 2013 se juntó con compañeros y amigos dando lugar a una banda peculiar; 'La Pandilla Voladora. Junto a él estaba Albert Pla, Muchachito, El Canijo de Jerez y Lichis. Un proyecto fiestero que incluía los grandes éxitos y fracasos de cada uno de los integrantes. Antes de eso, una formación similar llamada G5, que incluía además a Kiko Veneno, grabó un disco sin llegar a salir de gira. También ha grabado con Pastora Soler, Rosendo, Navajita Plateá, Los Delinqüentes.

Histriónico, delgado e inquieto, Tomasito canta en 'Soy un limón': La vida va deprisa y yo la vivo a mi manera. Esa manera es ser libre, desde el respeto y sin egoísmo y así consigue repartir más alegría, que es de lo que se trata.