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Nacida en la República Dominicana, criada en Nueva York y residente en Madrid, la vida de la actriz Lia Chapman (República Dominicana, 1967) no se entiende si no es ligada a cámaras, guiones, rodajes y estrenos. El último de ellos tendrá lugar hoy a partir ... de las 20.00 horas en el Centro Botín, donde Chapman presentará el estreno mundial de la película 'Mis 500 locos', de la directora Leticia Tonos, una proyección que marcará el inicio de la IV edición de la Semana Internacional de Cine de Santander, en la que este año el cine dominicano tendrá un protagonismo central. La película es una revisión de la compleja situación que vivió el país durante la dictadura de Leonidas Trujillo.
-Presenta en Santander el estreno mundial de 'Mis 500 locos'. ¿Qué supone participar en la Semana Internacional del Cine de la capital cántabra?
-La verdad es que estamos todos felices. Si lees la prensa dominicana la noticia está saliendo por todos lados, destacando el estreno mundial en Santander. Para mi es un placer porque España es mi tercer país y me apetecía mucho poder estar aquí y formar parte del equipo que va a presentar la película.
-¿Qué nos puede desvelar del nuevo filme que va a presentar?
-Una de los aspectos más interesantes de la película es ver cómo en un periodo de dictadura en un país se utilizaba un lugar como un manicomio para meter allí a presos políticos y tratarlos como si fueran locos. Narra una historia real muy dura, muy cruel, de lo que se vivió en República Dominicana, la del doctor Antonio Zaglul, alguien con un corazón inmenso que intentó ayudar en todo lo que pudo a las personas que estaban allí encerradas. Es la historia de estos seres, que están condenados a ser considerados locos, lo estén o no lo estén.
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-¿Qué papel interpreta usted en el largometraje?
-Es una mujer a la que su marido engañó con una vecina con la que se escapó. Ella los buscó por todo el país hasta que los encontró y los mató de una forma salvaje.
-¿Cuál es el objetivo de la película? ¿Tiene un ánimo revisionista o buscar ser la crónica de una época?
-Desde mi punto de vista la película aproxima a la gente joven, que no vivió la dictadura de Trujillo y que no ha sentido en su piel el horror, aquella época para que puedan verlo de cerca y conocer su historia. Es muy importante que la conozcan y sepan de dónde vienen y todo lo que aquella situación tocó y cambio a su gente. Que lo conozcan desde una perspectiva real, y no a través de lo que contaron los que hicieron lo que hicieron, desde la perspectiva de una persona que no gana nada quitando o añadiendo, sino que solo busca retratar la realidad.
PROTAGONISMO EN SANTANDER
CINE DOMINICANO
-Ha rodado con Leticia Tonos, una de las realizadoras con más proyección de su país. ¿Cómo ha sido esa experiencia?
-Leticia ha sido muy fiel, muy honesta con la historia que quería contar. Trabajar con ella es una enseñanza maravillosa. Cuando vi su primera película hace unos años me quedé anonadada. Desde entonces quería conocer a esta mujer y trabajar con ella, así que cuando me llamaron para hacer la prueba no me lo podía creer. Ahora somos muy amigas y la estimo mucho, es una tipa hipertalentosa. Es una persona que ha crecido con el cine haciendo todos los trabajos posibles que puedas imaginarte en un proyecto, desde guionista a directora de arte y ahora como directora. Lo sabe hacer todo y trata a los actores con un cariño y un cuidado enorme. Siempre tiene clarísimo lo que quiere. El rodaje fue un regalo del universo, aunque no he estado tan fea en mi vida, y además coja (risas).
-¿Qué supone para el cine dominicano su protagonismo en el certamen de Santander?
-Para nosotros es un lujo y un auténtico regalo. Lo cierto es que el cine dominicano está a un nivel impresionante, como demuestra el hecho de que ya hayamos tenido películas en festivales y foros de la categoría de Sundance, Tribeca o en Toronto. En ese contexto la Semana Internacional de Cine de Santander añade más valor a lo que se está haciendo allí.
-¿Cómo ha sido esa evolución del cine de República Domincana?
-Antes solo se hacían películas de humor, y de pronto ha surgido toda una oleada de cineastas jóvenes y no tan jóvenes que están haciendo un cine muy potente. Películas que se van a proyectar en Santander como 'Cocote' o 'Miriam miente' lo demuestran. Los responsables del festival han hecho una selección excelente para que la gente pueda conocer el potencial de nuestro cine.
-¿Cuáles son las causas de este auge del cine dominicano?
-Tiene mucho que ver el papel del expresidente Leonel Fernández, que es un apasionado del cine y creó la Ley del Cine, a través de la cual se ofrece un incentivo tanto al cine dominicano como a las coproducciones. Desde aquel momento el sector vivió un cambio tremendo. También es fundamental el hecho de que ahora en mi tierra hay un talento enorme, impresionante. Hay mucha gente que ha estudiado fuera y que ha regresado para desarrollar sus carreras allí y se está notando mucho. Gracias a ello en República Dominicana hay ahora escuelas de cine maravillosas.
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