'La Ortiga' se hace colectiva y gira al cooperativismo cultural autogestionado

Hoy jueves, a las 19.30, en la librería La Vorágine de Santander tendrá lugar la presentación del número 129 de la revista La Ortiga y de la nueva etapa de este proyecto cultural. La Ortiga creada en 1996 cumple ahora 23 años. Durante este tiempo, se han editado 128 ejemplares de la revista, además de varias colecciones de libros de ensayo, poesía y narrativa, ediciones de revistas sobre ciencias sociales, gastronomía, poesía visual y artes experimentales, pensamiento crítico, colecciones de pliegos de cordel y láminas; se ha creado un Foro Cívico de Debate, tres talleres itinerantes, un espacio gastronómico-cultural y un proyecto agroecológico.

La Casa de Fresno, espacio gastronómico donde se centró gran parte de la última etapa de la actividad cultural de Montesino. Esta vivienda familiar situada en Fresno del Río (Campoo de Enmedio) fue, desde el año 2005, sede del proyecto cultural, espacio desde el que se generaron cuatro colecciones de revistas, tarjetas, pliegos de cordel, jornadas gastronómicas, talleres itinerantes y encuentros con escritores, poetas y filósofos.

La cabeza tractora de este proyecto cultural entre 1996 y 2015 fue de Montesino quien mantuvo ininterrumpidamente su vinculación al proyecto y dirigió la revista La Ortiga y lideró las producciones culturales de esa etapa. En este paréntesis editorial, desde 2015 hasta hoy, se ha creado no obstante una plataforma digital que recoge todas las publicaciones vinculadas a La Ortiga, se ha participado en varios encuentros y foros sobre cultura, se ha continuado con la actividad de los talleres itinerantes y la formación, se han comisariado las exposiciones del XX Aniversario de La Ortiga en homenaje póstumo a Montesino, se ha reeditado el libro Las Marzas y un nuevo equipo de colaboradores.

La nueva etapa del proyecto, bajo el nombre de La Ortiga Colectiva, nace tomando como referente «un cooperativismo cultural autogestionado que ya sirvió de modelo para la edición de la última etapa no venal de la revista». El objetivo es recoger las voluntades comunes de trabajo de los colaboradores que forman parte de esta propuesta cultural en la actualidad y trabajarlas a través de distintos imaginarios. Entienden por imaginario «la voluntad de pensar, sugerir y contribuir a la necesaria toma de conciencia colectiva sobre un ámbito del conocimiento que, a su vez, engloba diversas temáticas que lo enriquecen, generan matices y posibilidades de debate y cambio social».

Para este 2019 la Ortiga Colectiva propone los siguientes: ecología, letras, artes, feminismo, pensamiento, alimentación y comunicación; cada uno de ellos con sus cuestiones específicas y todos ellos con modelos y dinámicas comunes de trabajo basadas en la co-creación y la participación voluntaria de los colaboradores. De esta forma, «dibujamos un mapa de imaginarios de pensamiento y acción que refleja las voluntades comunes del grupo, donde cada persona se pueda situar-resituar libremente en aquellos en los que quiera tener una participación más activa», explica María Montesino. Todos ellos se mueven como «procesos vivos, transdisciplinares, conectados e imbricados en una misma red: La Ortiga». Estos procesos se irán materializando en ediciones, talleres itinerantes, jornadas, formación, encuentros de debate, paseos en la naturaleza, vídeos documentales y exposiciones.

La Ortiga Colectiva, además, se escribe en femenino plural ya que, de un total de 19 colaboradores, 15 son mujeres, cuyo perfil es muy heterogéneo, con diferentes grupos de edad y procedencias del ámbito educativo, del diseño gráfico, de la psicología, de las ciencias sociales, de la fotografía, de las ciencias ambientales, del activismo feminista y ecologista, de la producción agroecológica o de las letras.

Esta Ortiga 129, la nueva edición de la revista, cambia de nuevo de formato, pero mantiene la cabecera habitual. Una publicación a todo color de 91 páginas con temática variada: fotografía, arqueología, sociología, poesía visual o agroecología; una entrevista en profundidad, 'Historia de vida', y una recopilación de frases de pensadores bajo el título de Con-citaciones. Las secciones variarán de un ejemplar a otro y podrán ser números monográficos como en etapas anteriores. Este número 129 de La Ortiga, editada un 8 de marzo, llama «a las luchas feministas y muestra estéticamente en su cubierta y colofón un reconocimiento a este movimiento que está liderando las vías de cambio social y de crítica a un sistema». La tirada del número 130 está prevista antes de que acabe el año y no se descarta que, a lo largo del 2020, la revista recupere su carácter cuatrimestral.