«La pandemia es sobre todo una crítica feroz al individualismo»

-Pese a la crisis sanitaria el cine sigue muy vivo, y la SICS es un buen ejemplo de ello. ¿Por qué es importante su celebración?

-Es importante que intentemos mantener las cosas en marcha, que la cultura no se detenga. Durante el confinamiento se vio la necesidad de contenidos culturales. Lo que nos ha salvado a muchos la cabeza han sido los libros, las películas, las series, la música... Por eso hay que seguir intentando hacer cultura y sobre todo hacer llegar la cultura a la gente, que es para lo que sirven los festivales de cine como éste.

-Aunque hubo mucha incertidumbre, el festival de Santander la superó y aquí está.

-Sí, en este tiempo de confusión y de no saber muy bien que hacer, porque nadie lo sabe, yo rompo una lanza por los entornos culturales porque se ha demostrado que son seguros, que hay que ir al teatro y hay que ir al cine, y que manteniendo los protocolos se puede seguir haciendo, consumiendo y disfrutando cultura.

-Presentan la película 'Santuario'. ¿Qué se van a encontrar los espectadores?

-'Santuario' es una película muy bonita que narra un viaje al océano Antártico, al mar de Weddell, una campaña de Greenpeace a la que nos sumamos mi hermano Javier, el director y productor Álvaro Longoria y yo. Nos embarcamos con ellos en el Artic Sunrise con la idea de conseguir la creación de un santuario oceánico en esa zona. La gente se va a encontrar una película muy bella, muy bonita, verdaderamente emocionante. Creo que es una película necesaria porque todo lo que sea llamar la atención sobre los problemas medioambientales es bueno, porque ahora mismo está todo copado por el covid.

-Con coronavirus o sin él, el cambio climático avanza.

-Es una de las grandes amenazas a nuestra supervivencia como especie, así que más vale que nos pongamos todos un poco las pilas porque es algo que ya está en marcha y, aunque hay visiones más pesimistas y mas optimistas, creo que todavía se puede actuar y que debemos hacerlo. 'Santuario' es también un documental militante con esta causa.

-¿Cree que el cine tiene poder para concienciar a una sociedad que se muestra tan anestesiada en ciertos aspectos?

-La cultura en general, el cine, la literatura, el arte... no tienen y no deben tener nunca la misión de ofrecer respuestas, pero sí tiene la obligación de plantear reflexión y dudas, de cuestionar cosas. 'Santuario' es una película que lo hace, que cuestiona un modelo de desarrollo que creo que no es sostenible. Quizás no te va a dar una solución exacta sobre lo que hay que hacer, que es algo que correspondería mas a los científicos, pero puede ayudar a que la gente tome conciencia. Para eso el cine es una herramienta muy útil porque es muy amena y que llega a las personas con relativa facilidad.

-¿Cómo le ha afectado a usted personal y profesionalmente la pandemia?

-No me quejo porque tengo la suerte de vivir en una casa cómoda. Lo he pasado mal pero como lo está pasando mal todo el mundo, por la gente que quieres y por la Humanidad en general. Lo que está pasando es terrible y tiene mucho que ver con el cambio climático, con la destrucción y la invasión por el ser humano de espacios que no nos corresponden, de una promiscuidad biológica con ciertas especies que no es adecuada porque es de donde salen todo este tipo de virus.

-¿Qué nos ha enseñado esta crisis sanitaria?

-La pandemia nos ha enseñado que no aprendemos nada. Está esa famosa frase que dice que «hay que conocer la Historia para no repetirla», pero por cada una de ellas hay otra frase igual de brillante en sentido contrario. Hegel decía que lo único que nos enseña la Historia es que nunca aprendemos nada de ella. Entre esos dos extremos estamos moviéndonos. Espero que saquemos conclusiones, que valoricemos lo público, la sanidad pública, la educación pública, la enorme importancia de invertir en investigación, porque eso no son gastos sino inversiones. Es lo que une al tejido social y lo único que nos puede salvar.

-La crisis, por tanto, no es solo sanitaria, sino más profunda, de

todo el modelo social...

-Esta pandemia está siendo un cuestionamiento brutal a muchísimas cosas del modelo social y económico globalizado en el que vivimos, pero creo que sobre todo es una crítica feroz al individualismo. Nos está enseñando que si hacemos la guerra cada uno por nuestro lado no saldremos nunca de esta mierda. O vamos todos a una o esto no lo superamos, porque da igual las precauciones que yo pueda tomar si el de al lado no las toma.

-¿Cómo ha visto evolucionar el cine español? ¿Cuáles son sus grandes valores?

-Ha ido creciendo de la mano de nuevas generaciones de cineastas que mantienen unas características que creo que son las que deben mantener nuestro cine. No tenemos una industria porque no se ayuda a que haya una industria como tal. No podemos competir con los grandísimos presupuestos de otros países. Nosotros nos dedicamos a contar nuestras historias, historias muy nuestras y muy pegadas a la realidad de la gente. Es el tipo de cine que a mi realmente me interesa.