«Pardo Bazán denunció el sometimiento de la naturaleza humana al patriarcalismo»

La biografía escrita por Gullón -ganador del Premio de las letras Ciudad de Santander- sobre Pardo Bazán llega tras el éxito de 'Galdós: maestro de las letras modernas', publicado con motivo del aniversario del escritor canario y en el que el catedrático ofreció una visión tan completa y concienzuda como amena e interesante, en la que mezclaba el perfil y el recorrido humano de Pérez Galdós con su faceta como escritor, articulista, músico, político y pintor. La riqueza de ese enfoque es también, explicó Javier Menéndez Llamazares, la que va a convertir la nueva obra de Gullón en la referencia esencial para acercarse a la figura y obra de Emilia Pardo Bazán. Para el periodista, en la obra de Gullón «no hay lenguaje alambicado sino escritura limpia, apasionada, de calidad», gracias a la cual «nos lleva por que es casi una novela trepidante sobre la vida y la obra de Pardo Bazán». Así, el autor santanderino construye en 'Emilia Pardo. El tiempo de la mujer' una doble visión que une a la persona y al personaje con todo aquello que va publicando. Algo que Gullón hace, destacó Llamazares, con su estilo característico: «No te encuentras con la altivez del catedrático, sino con la cercanía del que habla de algo que le apasiona».

Y así lo hizo el experto en el Ateneo, donde presentó una obra «de 364 páginas, con siete capítulos sobre la vida y la obra de Pardo Bazán que incluyen 459 notas, una completa bibliografía, un indice onomástico con un millar de datos, 21 imagen y unos apuntes autobiográficos escritos por la propia autora», destacó Juan Herrán. En esos cuatro centenares de páginas, Germán Gullón retrata a una mujer con una «enorme fuerza intelectual dirigida a contar su experiencia humana como mujer pero también a retratar cómo naturaleza humana esta sometida por el patriarcalismo», explicó el autor, que decidió escribir esta obra «con cabreo por falta de reconocimiento en el aniversario de una escritora y ensayista extraordinaria que es prácticamente desconocida en el panorama español y que tampoco forma parte de los planes de estudio».

Durante más de una hora Gullón perfiló el apasionante recorrido vital y creativo de la escritora gallega y la influencia de sus experiencias en sus propias obras. Hija de una familia noble, explicó Gullón, «estudió en un colegio francés en Madrid, y aprender aquel idioma fue un pasaporte al mundo, que le permitió viajar por toda Europa y leer gran literatura». Todo ello se tradujo en que «cuando regresó a España se encontró con todos los intelectuales, que salvo contadas excepciones tenían una mentalidad mucho más cerrada y se escandalizaban de que una mujer no solo acudiera, sino incluso hablara en el Ateneo». Bazán quiso entrar en el círculo intelectual y lo hizo gracias a su simpatía y a personajes como González Linares, Ginés de los Ríos o Menéndez Pelayo -que sentía celos de su estilo de escritura, atractivo y didáctico. Fue madre, mantuvo una relación amorosa fructífera e intensa con Galdós pero no culminó en nada porque éste era muy suyo y jamas se comprometió con ninguna», explicó Gullón. Quiso ser catedrática, se opusieron durante años y lo consiguió. Quiso ser académica y lo mismo. «Se encontró con el misoginismo de la España de entonces, y no se sometió», concluyó Gullón.