El Parlamento comparte la excelencia del arte a través de la Colección de Jaime Sordo

Son una parte mínima pero tremendamente significativa y selecta de los fondos de Bragales, una edificación reflejo de la personalidad de este ingeniero de profesión, empresario por vocación y «vicioso pasional de la creación artística», tal como se definió el pasado año en una entrevista en El Diario. Jaime Sordo, emocionado, reclamó ayer la pasión como el verdadero vaso comunicante con artistas, galeristas, ferias e instituciones del arte a la hora de construir una Colección, hoy en día, configurada por cerca de medio millar de obras y que ha proyectado y compartido públicamente a través de un centenar de exposiciones en Cantabria y en numerosos lugares del Estado desde 2008. El coleccionista, emocionado, reivindicó ayer ante unas 150 personas, en la apertura de la muestra, la «labor social» del coleccionista, mientras evocaba a personalidades que han sido clave en su trayectoria con el arte como Manuel Arce y Miguel Marcos. Una pasión que nunca ha desfallecido y que ha sembrado a través de museos y centros de arte, ferias nacionales e internacionales y galerías. Nombrado coleccionista de 2013 por el Instituto de Arte Contemporáneo (IAC), presidió durante más de doce años la Asociación nacional 9915. En su intervención, rodeado de esas dieciséis obras que conforman 'La pintura', se refirió a la ecuación: compra, análisis, evolución y pasión que ha fundamentado sus pasos y decisiones. Sordo, que siempre ha mostrado sentido crítico, recordó las pobres cifras y la escasa presencia del arte español en el ámbito internacional, además de apelar a «la sensibilidad e inteligencia visual y emocional» que debe vertebrar el vínculo entre los factores humanos y creativos que componen la cadena del arte.

Antes, la presidenta del Parlamento María José González Revuelta elogiaba la figura de Sordo, y recordaba las exitosas exposiciones que el pasado año impulsaron la actividad cultural de la institución, caso de Pisano y la Escuela de París, o la colectiva Audaces. Por su parte, Jesús Alberto Pérez Castaños, comisario de la muestra y colaborador del coleccionista, alabó la actividad desarrollada por Jaime Sordo plasmada en una colección con «perspectiva educativa y social».

Sordo recibía hace apenas un año un homenaje en ARCO en reconocimiento a su labor. En el mundo del arte, declaraba entonces a El Diario, «siempre es conveniente vacunarse contra tanto marketing influyente». Para darse un baño de autenticidad basta visitar su exposición.