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La delegación cántabra del Instituto de Arte Contemporáneo (IAC), asociación independiente de profesionales, centrará una de sus acciones inmediatas en solicitar «un debate riguroso sobre el nivel presupuestario de cultura dentro de la comunidad». El colectivo, que mantuvo una reunión el pasado día ... 1 abordó sus estrategias y analizó su implicación y grado de participación en los órganos culturales de la Consejería de Cultura y del Ayuntamiento de Santander. A la hora de abordar las acciones futuras se hizo hincapié en la necesidad de reclamar un debate sobre el presupuesto: «Es llamativo que en todas las comunidades roce un 4 o un 5% del total, mientras que en la comunidad autónoma de Cantabria estamos en un 0,76%».
Asimismo, el colectivo pide «un portal de transparencia cultural» tanto al Gobierno regional como al Ayuntamiento. El IAC en Cantabria, que preside Noemí Méndez, artífice de la firma cultural y editorial Nocappaer, celebró el pasado día 1 una asamblea territorial con el objetivo de transmitir la situación de Cantabria en la próxima cita nacional. Además de esas acciones, el IAC ha expresado su interés para que se formalice su participación en los procesos abiertos dentro de Santander y Cantabria ya que, razonan, «conseguir formar parte de los Consejos de Cultura y ser valorados como una asociación con una década de trayectoria y el respaldo de más de 500 asociados a nivel nacional son una de las prioridades».
IAC en Cantabria, que forma parte del Consejo Municipal de Cultura desde el pasado mes de julio, creció, a mediados de este mismo año, gracias a la unión de nuevos socios, entre los que se encuentran destacados artistas y coleccionistas. Entre las decisiones adoptadas ahora destaca su solicitud para que se revisen las bases y el manual de justificación de las subvenciones, «adaptándolas lo máximo posible a las normativas del Ministerio».
En paralelo IAC en Cantabria, junto a la Plataforma de empresas culturales de Cantabria, Pecca –formada por casi 40 firmas de todos los sectores– y la Asociación de Galerías de Cantabria, Agacc, han decidido por unanimidad, desde sus respectivas juntas directivas, explicar públicamente el próximo día 11 «las demandas comunes del sector del arte contemporáneo en Santander y Cantabria». Un 60% de los asociados acudió a la asamblea. Entre ellos se encontraban representantes de otras asociaciones y juntas directivas a nivel regional, como las citadas Agacc y Pecca, además de artistas, coleccionistas y otros profesionales.
. El futuro del MAS, Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Santander y Cantabria, siempre asoma en los debates y foros ligados al mundo del arte. La asamblea del pasado día 1 no fue una excepción. La delegación cántabra del IAC recordaba que tiene aún mucho camino por hacer ya que, tras la invitación desde la Concejalía en julio del pasado año para integrarse en el Consejo Asesor del MAS, muchos han sido los sucesos que han «ralentizado esta incorporación». Tras el incendio del Museo hace ya casi un año, una parte de la propia comisión estimó que el IAC, incluido en la mayor parte de órganos de museos e instituciones del país, «no debía estar representado dentro del consejo asesor». Aún así, desde el Ayuntamiento, se ha transmitido tranquilidad ya que aún no está fijado el comité. Según el decreto del BOC, son la alcaldía y la concejalía quienes lo deciden.
Sobre la situación del MAS, el Instituto, en su reciente reunión, remarcó que deben solicitarse las actas de ese comité asesor ya que «nos consta que algunos de sus miembros no han sido convocados a las reuniones». Entre las acciones previstas se exigirá la realización de «una consulta jurídica externa para poder elaborar un concurso de dirección del museo y reubicar a su actual director (Salvador Carretero) en su plaza de conservador». Además el IAC cree relevante «mostrar el informe de Lola Jiménez Blanco ya que «no se entiende que no haya contactado con ningún profesional de la ciudad para su elaboración». Finalmente, el IAC califica de «necesario» conocer los acuerdos de cesión o intercambio de obras entre el MAS y otros museos o colecciones privadas tras el incendio.
Por otra parte, a la hora de valorar los vínculos con las instituciones, el IAC expresó su agradecimiento por la buena sintonía con la Concejalía ya que, desde que se pusiera en contacto con ella la delegación de Cantabria, «ha tenido en cuenta las peticiones de la asociación dentro de las posibilidades de su agenda, así como las demandas de formar parte de otras comisiones como la de seguimiento del Plan Director de Cultura». Sin embargo, se criticó a a la Consejería de Cultura del Gobierno cántabro, dado que aún no han existido «posibilidades de reunirse para presentarse como asociación nacional, del más alto nivel y demostrada experiencia y que, en nuestra comunidad, cuenta con una alta representatividad».
La anterior asamblea del IAC en Cantabria se celebró el pasado mes de enero y en ella se trazó una ambiciosa ruta de la que los principales logros conseguidos han sido a nivel municipal. Tras la reunión del pasado lunes, y a modo de balance, el IAC decidió centrarse en acciones como las citadas que requieren prioridad. Las cifras presupuestarias comparativas revelan, según los tres colectivos, que es una coyuntura de «una enorme relevancia y por ello cabe solicitar a los partidos políticos que analicen este hecho intentando acortar las distancias presupuestarias y subsanándola. La intención es que se incluya un aumento de esta partida en los presupuestos generales con vistas a las elecciones de 2019».
Otras de las acciones planteadas radica en solicitar que el Premio de Artes Plásticas tenga la difusión que se merece así de la falta de rotación en los jurados del premio. Asimismo se considera que debe solicitarse a las instituciones de «manera consensuada» una declaración de apoyo al «estatuto del artista para agilizar su tramitación».
Dada la importancia de la profesionalización, el Instituto subraya otras dos peticiones vinculantes: «La diferenciación entre profesionales y no profesionales en la defensa por la cultura ya que los intereses y visión no son iguales; y que las consultorías profesionales «resulten vinculantes o al menos se remuneren debida a la gran inversión de tiempo que eso conlleva a los profesionales de la cultura».
El IAC, una de las asociaciones más valoradas a nivel nacional, «pasa inadvertida a nivel institucional en nuestra región». Para sus representantes «lo realmente loable en materia de cultura sería la aparición de un pacto por parte de los responsables de los diferentes partidos políticos». En la reunión del pasado miércoles con la Consejería para conformar el futuro Consejo Cántabro de la Cultura, el IAC tampoco vio clara la función de los profesionales, «ya que mezclar profesionales con no profesionales no parece pueda mejorar las perspectivas de profesionalización de la comunidad».
Aunque el IAC aplaude la iniciativa, considera que «aún está en una fase muy embrionaria como para ser de utilidad. La mayoría de los profesionales que han delegado su inscripción no podían hacerla por ese sistema y fueron emplazados a otra cita en la que el horario es el mismo y hará que sigan sin poder acudir en gran medida, por lo que se considera que el sistema de acreditación debería ser más profesional y coherente con el sector».
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