Tabacalera y El Casino acogerán más de una docena de exposiciones

El programa expositivo de Tabacalera cuenta actualmente con la muestra 'Petricor, olor a lluvia', del pintor cántabro Francisco Díaz, que ha supuesto el cierre de la temporada de 2023. La nueva arrancará en febrero con Pablo Burgos, director del centro de estudios de arte Pisano en Torrelavega, que expondrá su colección de bodegones y obra reciente. En abril, será el turno de Veronique Sobrado, hija del pintor Pedro Sobrado.

Además, en mayo, estará Javier Velarde, reconocido diseñador de piezas en decoración, que expondrá por primera vez una muestra inédita con obras basadas en su estilo tan colorido y reconocible. En junio, Bruna Calderón, hija del dibujante, pintor y muralista Fernando Calderón, presentará una doble exposición, en el Centro Cívico Tabacalera y en Inder Espacio. Mientras que Gloria Torner será la protagonista del mes de julio, con una muestra que permitirá celebrar el tercer aniversario del centro. Tras el verano, Nieves Moriano recalará en Tabacalera. La destacada pintora, que expondrá su obra más reciente, ha sido premiada en distintos certámenes y encuentros pictóricos. Ya en noviembre, Juan Ignacio Goitia pondrá el broche final a la programación anual.

Respecto a la programación de El Casino arrancará en marzo/abril con Enrique Enríquez, pintor y artista gráfico cubano nacido en la Habana en 1970 y residente en Santander que desde 1994 ahonda en la abstracción, el retrato, el collage, fusionando diferentes técnicas y estilos que van del expresionismo al arte pop más gráfico.En mayo/junio será el turno de la pareja Ana Canal y Carlos Pallà, y en julio se volverá a dar protagonismo al arte de los Baños de Ola, con la colección de vestidos de época Vera Simons. Y en agosto el protagonista será Pedro Sobrado, uno de los grandes iconos del arte regional. Entre septiembre y octubre la sala acogerá a Mamen Restegui, artista multidisciplinar con una extensa trayectoria.

Finalmente, la sala de El Sardinero contará con el santanderino Antonio Moro, uno de esos artistas apasionados por sus obras, en las que refleja sus sentimientos.