Tradición y modernidad japonesa

La exposición, que recala este verano en Santander de la mano de Cultura, del 4 de julio a 31 de agosto, constituirá la iconografía dominante de la Biblioteca Central en su Sala Angar del Archivo Provincial.

Un conjunto de miradas vertebradas por lo antropológico que exhiben de una «manera documental, cercana y directa el estilo de vida de una cultura muy distinta a la europea». Ello permite conocer mejor a esta sociedad, enseñando al espectador las características de ese increíble país. La propuesta es un álbum, a modo de diario visual, en el que se utilizan dos ciudades como metáfora de una singular simbiosis: «Kioto, como la antigua capital en la que se conservan las tradiciones más ancestrales y Tokio, la moderna capital ultra tecnológica donde la vanguardia es más puntera». El proyecto es el resultado de más de tres años de trabajo en el que Rivas recorrió más de diez mil kilómetros «para mostrar la capacidad de convivencia de estos grandes contrastes». A nivel artístico las imágenes también destacan por su belleza que sirven para despertar el interés plástico. Y se incluye una dimensión de divulgación turística por lo estético de sus retratos. Además, «enseña cómo ha conseguido Japón con esa doble virtud, llegar a ser uno de los países más avanzados del mundo».

La cita se enmarca en el hecho de que en este 2018 se cumplen 150 años del Tratado de Amistad, Comercio y Navegación entre Japón y España con el que se inician las relaciones diplomáticas entre nuestros dos países. Eduardo Rivas (Santander, 1984), con la imagen 'Las tres edades', obtuvo hace dos años un accésit en el certamen fotográfico 'Caminos de Hierro'. Como freelance ha trabajado para distintas agencias en Madrid, Amsterdam, París y Nueva York. Compaginando siempre esta labor con el desarrollo de proyectos personales, ha recibido en estos años diferentes becas y premios, caso del Premio Nacional de Fotografía Científica 2015, entre otros.

Su foto 'Próxima estación', que logró el premio del Gobierno cántabro el pasado año, se enmarcaba en una serie sobre los refugiados. Y 'Esencia cubana' fue el título de una colección que expuso hace más de tres años en la Sala del Casyc Up de Caja Cantabria.